Renata es una artista desesperada que recurre a una intriga para utilizar la fama de un ex compañero de preparatoria para impulsar su propia carrera como dibujante de historietas. Cree que se salió con la suya, hasta que la mentira se le escapa de las manos y se ve obligada a fingir que es la novia de la estrella de rock.
Leer másMe mordía los labios para no llorar de la rabia y no pude evitar apretar la mano que sostenía la cerveza tanta fuerza que temí que se rompiera la botella de cristal.
Cuando lo reconocí debajo de los reflectores sentí ganar de gritar de frustración, aunque el sonido se perdiera en medio del escándalo de la música.
La vibración causada por las bocinas que ampliaba su voz para que llegara hasta la ultima de las gradas de la arena de fans que grietaban su nombre en éxtasis golpeaba mi pecho y aunque era apenas perceptible igual dolía en esas circunstancias.
Ese infeliz estaba en el escenario seduciendo a la multitud que rugía como un monstruo terrible mientras yo no tenía idea de como demonios iba a llegar a fin de mes a pesar de que me había matado trabajando incluso más de lo que nunca había hecho cuando era una empleada de oficina.
¿Quién m****a dijo que a los que obran mal les va mal? Leo era un maldito bully y yo había sido la idiota que nunca se metió con nadie, sin embargo èl estaba rodeado de gente que lo idolatraba y había pagado miles de pesos para verlo mientras yo había ido al concierto sólo para convencer a la compañera de trabajo que me había invitado de que estaba viviendo mi sueño y haber renunciado no había sido el peor error de mi vida.
Me terminé el resto de la botella de un sólo trago y me gasté lo que quedaba mi cuenta de ahorros para comprar una ronda más.
Selena, quién me había invitado como ultimo recurso porque había terminado con su novio y su mejor amiga había enfermado inesperadamente unos días antes del evento, tomó la botella que le ofrecí y siguió saltando con los demás y coreando las canciones, totalmente ajena a la revelación que yo acababa de tener gracias a este escupitajo en la cara de parte del destino sobre la injusticia del mundo y la inutilidad de esforzarte honestamente para lograr tus metas.
Entonces, no sé si fue culpa del alcohol o la desesperación o si simplemente una mente que se dedica a crear historias se vuelve buena para crear intrigas, pero se me ocurrió un plan tan brillante como moralmente cuestionable.
Sonreí mientras lo miraba lanzar su embrujo hacia la audiencia, tenía una manera de mirar que te hacía creer que su sonrisa lasciva estaba destinada a ti en particular, aunque siendo lógicos no era posible que reconociera un rostro entre tantos.
No iba a negar que mi antiguo bully tenía presencia escénica y que el disfraz de niño malo le venía bien, lo cual dejó de fastidiarme en cuanto comprendí que sería conveniente para mí si tenía en cuenta que planeaba vengarme utilizando su fama a mi favor.
Pase la hora restante del espectáculo deborandolo con la mirada, tratando de memorizar cada detalle de sus facciones y sus expresiones, su postura en el escenario y las proporciones de su cuerpo.
Su estructura facial era irritantemente perfecta, así que no iba a ser difícil adaptarla a mi estilo y hacer que se viera bien, pero tratar de capturar su presencia en una viñeta iba a ser un reto.
Después del concierto llegué a casa agotada y era casi media noche, pero aún así lo primero que hice, después de quitarme las botas altas y patearlas debajo de la cama fue poner café para empezar a trabajar.
No hacía falta trabajar en el diseño de personajes, porque los tenía claros en mi mente cómo si los estuviera viendo frente a mí, al protagonista masculino cuando menos, y el storyboard empezó a fluir como un diluvio una vez que el objetivo estuvo definido.
Tal vez no era el mejor momento para empezar con un nuevo proyecto, pero no tenía tiempo que perder para echar a andar mi plan, así que pasé la semana siguiente trabajando como una posesa en un conmovedor romance entre el vocalista de una banda de rock que recientemente había encontrado una fama sin precedentes gracias a que una de sus canciones se hizo popular como parte de una tendencia en tiktok y su primer amor, a quién había conocido durante sus años de escuela y que ahora debía mantener oculto para protegerlo de la opinión pública.
A simple vista no había nada realmente especial en ese argumento y además todos mis trabajos anteriores habían sido thrillers, no romances, pero tenía un plan para asegurar que esta historieta no pasara desapercibida como tantas otras.
La primera parte estaba en los personajes y es que protagonista masculino tenía los mismos penetrantes ojos azules, melena obscura y complexión de Leo y la heroína era una castaña bajita y flacucha igual que yo, aunque hice lo mejor que pude para concederle un poquito de gracia por el bien de la trama.
La segunda era un poco más cuestionable y se trataba de enmarcar nuestros rostros con un plumón rojo en la foto de generación de segundo de preparatoria y escanearla para enviarla de manera anónima a una cuenta de tamaño considerable que se dedicaba a discutir chismes de celebridades, con el link a la historieta en línea, por supuesto.
¿Era una manera honesta de conseguir publicidad y atraer tráfico hacia mi trabajo? No, evidentemente no, en circunstancias normales no me hubiera sentido cómoda usándolo de esa forma para mi beneficio personal, incluso si realmente hubiera algo entre nosotros, pero podría decirse que me lo debía ¿O no? Si el Karma estaba demasiado ocupado como para ocuparse de ese bastardo yo bien podía echarle una mano y conseguir la forma de pagar las cuentas a fin de mes en el camino.
También lastimaba un poquito mi orgullo el que los lectores estuvieran ahí por morbo y no por la calidad de mi trabajo, pero mi cuenta del banco decía que no me alcanzaba para ser quisquillosa.
Después de haber trabajado tanto que mi cuerpo lo resintió durante semanas, finalmente la cuenta habló sobre la jugosa información que habían recibido de forma anónima y las visitas tanto a la historieta como a mi perfil en las redes sociales empezaron a llegar como un alud.
En un principio no me molestó en absoluto que los números se dispararan más de lo que había imaginado, pero había sido muy ingenuo de mi parte no prever que una mentira de ese tamaño iba a terminar saliéndose de mis manos.
Cuando por fin llegué a casa, me tiré sobre la cama y lloré hasta quedarme dormida sin desmaquillarme o cambiarme la ropa.Unas horas más tarde la canción que usaba como alarma me martilleo la cabeza hasta que me levanté a sacar el celular del bolso que había dejado en el piso a mitad del pasillo para apagarla.Decir que estaba hecha un desastre sería casi un eufemismo, pero el orgullo o quizá el miedo a dejarme caer al precipicio me obligó a tomar una ducha y beber un café para ir a trabajar a pesar del dolor de cabeza.No estaba inspirada y apenas tenía capacidad de concentrarme lo suficiente para llevar a cabo las tareas más rutinarias, como ordenar cuentas o responder a los emails.Estaba agotada, en esas condiciones era muy tentador tomar vacaciones por primera vez años, pero para ser sincera no sabía qué hacer con mi dolor cuando no estaba trabajando como una mula para no pensar en él, así que pasé unas horas sentada en mi escritorio haciendo un esfuerzo sobrehumano para consegui
A regañadientes me subí a su coche, pero eso no significaba que el camino a casa fuera a ser sencillo o placentero.— No sabía que Valeria y tú fueran tan cercanas ¿Fue la primera a la que le contaste cualquiera que sea la buena noticia de tu trabajo?Murmuró después de unos minutos de silencio incomodo.— Yep…Respondí sin apartar la mirada de la ventana.— Me pregunto cuando se volvieron mejores amigas…Me encogí de hombros.— Me cayó bien desde el principio, es tan abiertamente ella misma... voy a echarla de menos.Admití en un ataque de honestidad provocado por el alcohol que aún estaba en mi sistema.— Es un poco pronto para despedidas ¿No crees?— ¿Lo es? ¿No has hablado con Karina sobre lo que dije la última vez?— No he tenido la oportunidad, si tienes tanta prisa en salir de esto voy a buscarla mañana mismo o mejor dicho en un rato. — Vale, gracias.Estaba todavía demasiado intoxicada como para leer entre lineas y no me di cuenta de la implicación de mi respuesta hasta que L
“Voy a invitar a Valeria a celebrar algo relacionado con el trabajo. Si llega a mencionarlo, estabas al tanto de todo ¿De acuerdo?”Le escribí a Leo, incluso antes de hablar con Valeria en persona.Si era honesta conmigo misma quería contarle todo a él, idealmente sería la primer persona con la que compartiría la noticia, y deseaba que me sonriera y me felicitara, que me diera palabras de aliento cuando expresara que no estaba segura todavía de que el trato fuera a concretarse casi tanto como que las negociaciones tuvieran éxito, pero era demasiado cobarde como para exponer aún más mi corazón.La pelirroja era una opción mucho más segura, después de todo había alguna posibilidad de que siguiéramos siendo amigas incluso después de que terminara con su compañero, aunque a decir verdad también iba a extrañarla bastante si por alguna razón las cosas salían mal y su manager le prohibía seguir en contacto conmigo algo así.Me esforcé por no pensar en todas las cosas que podían empeorar una
Esa noche llore sobre mi almohada antes de quedarme dormida.Era estúpido que me doliera un golpe que no había recibido todavía, pero mi corazón se rompió tan pronto como supe lo que iba a pasar y ya lo echaba de menos.A pesar de todo, al día siguiente me desperté temprano y asumí mi rutina habitual de trabajo, porque había un límite para lo patética que podía llegar a ser y después de todo llorar por un chico que tenía novia era una cosa, pero quedarme tirada en la cama como una inútil por su culpa era otra, por más que ganas no me faltaran.Salí de la cama, me arrastré a la cocina a desayunar y elevar mi nivel de cafeína en sangre.Mi celular no dejaba de sonar y nunca creí que el ruido podría llegar a ser tan molesto.Esta vez no corrí a ver lo que pasaba, seguramente se trataba de la fotografía de nosotros besándose que iba a extenderse como un maldito incendio y si algo más estaba sucediendo no quería saber, no estaba lista para lidiar con eso de todas formas.Tomé una ducha con
En cuanto nos separamos y supe que las consecuencias de lo que acabábamos de hacer estaban por caerme encima las manos me empezaron a temblar. Me terminé lo que quedaba en mi copa de un trago antes de hablar para romper el silencio, temerosa de que si no lo hacía se volviera tan denso que nos terminara aplastando. — Más vale que eso haya funcionado. — Lo sabremos en un par de horas, pero estoy seguro de que eso será suficiente. — Bueno, va a ser muy difícil mantener nuestra relación ambigua si se publican fotografías de nosotros besándonos ¿Verdad? Es prácticamente lo mismo que una confirmación. Lamento mucho que hayamos tenido que llegar a esto.— No es para tanto, no íbamos a poder mantener el misterio por siempre de todas formas.— Supongo… eh… deberíamos terminar nuestra cena y marcharnos ¿No crees? Imagino que quieres hablar con Sofía cuanto antes.Las palabras dolieron apenas salieron de mi boca, pero era cierto que su prioridad era arreglar las cosas con su novia antes de
Decir que estaba nerviosa por estar en público con Leo después de que se me acusara de ser una infiel promiscua era poco.— No estoy segura de que haya sido una buena idea salir cuando tus fans me tienen amenazada de muerte.Dije mientras trataba de actuar con naturalidad, como si fuera una cena más con mi novio.— No te preocupes, las amenazas no son divertidas en absoluto, pero viniendo de un grupo de adolescentes desubicadas dudo mucho que escalen a violencia, además la seguridad en este restauran es bastante buena y yo no voy a dejar que te pase nada. Ahí iba otra vez a sonar como un caballero en brillante armadura para alguien que no era su princesa. Algún día iba a tener que hablar con él al respecto, es decir, obviamente yo no era tan incauta como para confundirme, pero si seguía así iba a romperle el corazón a una chica más ingenua o meterse en problemas con su novia. — Supongo que tienes razón, no parece que dejen entrar a cualquiera a un lugar así, es sólo que me preocupa
Último capítulo