Cuando Daria Lewis cumple sus 22 años de edad muchas cosas están pasando a su alrededor, la vida le sonríe a esta hermosa estudiante pronta a empezar sus prácticas. Su hermana y su padre son sus mayores adoraciones y sus amigas, las compañeras de la vida que siempre soñó. Pero ¿qué pasa cuando se topa con la persona menos inidcada? La desaparición de Daria por más de cinco años y su "rescate" por su ángel de la guarda es parte de la saga de los O'Connor y ya entenderán el por qué. Las invito a esta nueva historia, con muchas vueltas, deseos prohibidos, algo de comedia negra y esa pizca de maldad que a veces cubre a mis personajes. EL despertar de la bella durmiente es la continuación de Una terapia para el Ceo. contada por sus personajes. Les doy la bienvenida y les recuerdo Las terapias son de cargo de quien lea.
Ler maisEl despertar de la Bella durmiente.
Prólogo. Oxford, en los dormitorios de la escuela de medicina, hace siete años atrás... -¿Piensas vestirte así para tu cumpleaños Daria? -le pregunta Cat, su mejor amiga con la que está hablando por videollamada. -No haré nada del otro mundo, Cat. Solo leeré un rato mi novela y luego me iré a dormir. -Pero mujer, estás cumpliendo veintidós, eso pasa una sola vez en la vida. -Nunca te he entendido, la gran Daria Lewis, la mejor de la clase y el objeto de deseo sexual de media facultad ¿no quiere celebrar su cumpleaños? -No es que no quiera, amiga. Es solo que esperaré al fin de semana que Vannah esté libre de su guardia en el hospital y viajaremos juntas para celebrar con mi papá. -Pero vamos, aguafiestas. Disfruta de la vida que es corta-dice en tono dramático su amiga y Daria suelta una carcajada al verla como coloca sus manos en las caderas. -Está bien, está bien, pero volveré temprano, no pienso descuidar mi descanso diario y mi tratamiento de belleza. -¡Yes!-su amiga celebra tras la pantalla y se acerca a ella quedando solo sus ojos y naríz como si fuera un bicharraco- Te paso a buscar a las ocho. -No te preocupes, yo llegaré. -¿Me lo prometes? Sino te juro que te iré a buscar de las mechas a los dormitorios. -Te lo prometo, Cat. Ahora, déjame colgar que tengo que hacer algunas cosas antes de vestirme y salir a mi linda fiesta de cumpleaños. Daria colgó la videollamada y comenzó a buscar qué ponerse, era su cumpleaños y sus amigos le habían organizado una pequeña celebración en el bar de uno de sus amigos y ya le había prometido a su amiga Cat que estaría ahí, aunque pocas ganas tuviera. A los pocos minutos, encontró esa hermosa falda roja plisada que le regaló su hermana para su cumpleaños número veintiuno, lo combinó con una linda blusa negra y esas botas hasta las rodillas que se compró en el mercado de las pulgas de la universidad. Se duchó y depiló, quería estar apropiadamente bien si pasaba algo con ese chico que tanto le gusta, ya habían hecho match y estaba segura que después de su conversación con su amiga el chico estaría ahí. No la juzguen, es una chica vivaz y libre que ama la vida por sobre todas las cosas y, a diferencia de su hermana le gustaba de vez en cuando pasar una buena tanda de sexo sin compromiso. Mientras se aplicaba el labial, su teléfono volvió a sonar, pero ahora era su hermana la que la llamaba. -¡Holi! -¡Feliz cumpleaños, preciosa! Que los cumplas feliz. Te amito. -Gracias, hermanita, te amito yo también. ¿cómo va todo en tu internado? -Cómo la m****a-su hermana bufa cansada y un tanto molesta-, pero ya sabes, esto de pasar por todas las áreas antes de decidir a cuál nos vamos a dedicar y yo ya tengo claro que es lo que quiero. ¿Y tú? ¿Cómo van los estudios? -Pues extenuantes, no hayo la hora de que terminemos y te siga en el hospital. -Pero estás a nada, hermanita. ¡Yo sé qué puedes! -Lo sé, lo sé, ambas nos quejamos de llenas, hermana. A propósito ¿ Vendrás tú o voy yo a buscarte? -Preferiría que vengas tú, así me rescatas como mi princesa caballero y aprovechas de ver el lugar, te conozco y sé que te gusta más esa idea. -¡Bruja! Pero tienes razón, me parece perfecto, el viernes llego en la tarde a buscarte a tu hospital. Ahora, voy saliendo para celebrar con los chicos en el bar de Jim. -No bebas demasiado, ya sabes como te pones con un poquito de alcohol. - ¡Eres un incordio, Savahnnah Lewis!-la chica chilla molesta, pues su hermana la trata como una bebé, aunque tienen once meses de diferencia. -Perdón, su majestad, pero de verdad hermanita, cuídate mucho, eres nuestro solesito y lo sabes, sólo me preocupo por ti. -Ya, ya, mamá gallina, lo prometo. A lo lejos se escucha que alguien llama a su hermana y esta despide mandándole muchos besitos y deseándole que la pasara muy bien en su fiesta de cumpleaños, ambas hermanas se adoran y les gusta compartir mucho entre ellas su día a día, pero desde que Savannah había comenzado sus pasantías estos cortitos tiempos tras el auricular o la pantalla era lo que tenían y lo aprobechaban al máximo... La hora había llegado y una chica rubia, de ojos grises y una sonrisa angelical sale de su cuarto para celebrar junto a sus amigos su cumpleaños, cierra la puerta de su habitación, revisando que todo esté perfectamente ordenado y guardando su celular en su bolso. Baja por las escaleras, como siempre, pues le ayuda a mantener esa perfecta silueta de reloj de arena y saluda a varios de sus compañeros de dormitorio en el paso. Al salir, los rayos del sol ya están desapareciendo en la villa universitaria, respira el aire que llena sus pulmones y toma su bicicleta. Mientras sale del campus, su teléfono vuelve a sonar y decide detenerse y fijar el freno de su bicicleta, saca el teléfono de su bolso y contesta. -Hola. Siente los pasos de alguien tras ella y vuelve a preguntar quien la llama, lo más extraño es que los sonidos que se escuchaban detrás de la línea ahora los escucha casi a su lado. La respiración acelerada y los pasos raudos se hacen más cercanos que de la nada corta la llamada y se da la media vuelta para mirar y en ese segundo de descuido todo se vuelve negro. Esa sería la última vez que tendría una conversación así con su amiga Cat, la última vez que llamaría a su hermana para contarle que pasaría su cumpleaños con sus amigos, la última vez que vería la luz... Con esta pequeña introducción damos comienzo al Despertar de la bella durmiente, la historia de Daria y Agustín. Seguiremos en este mismo libro para que no pierdan la pista. Las actualizaciones serán tres veces por semanas y recuerden no será una historia larga.Amistad a prueba de todo... -¿Tienes todo listo para la misión? -Todo listo, no me precio de ser el mejor hacker por las puras, amigo. Además, este será mi último trabajo. -Tu novia te lo agradecerá, Cameron. -Ah... -¿Por qué suspiras? -No sé, siento que lo mío con Marcela ya no está funcionando. -¿Has hablado con ella? Mira que ella ya anda con el vestido en el bolso y sabes a lo que me refiero. -Yo soy un alma libre, hermano. No estoy para eso del matrimonio. -Pues ella piensa distinto, incluso la he escuchado con las chicas y creo que está esperando la roca en su dedo. -Entonces se quedará esperando, pues en mis planes no está el amarrarme a nadie. -Yo que tú se lo digo, esta misión es peligrosa y todo puede cambiar de la nada-ese es Enzo que entra a nuestra sala de operaciones, un tanto molesto y lo entiendo, ya todos pensábamos que por fin Cam, había encontrado a su media naranja, pero al parecer nuevamente nos equivocamos con él. -No me jodas, Di Rossi, si
Agus y Daria- Necesito que te muevas más fuerte, Agus... por favor...- Argh mujer, me estás matando...Los futuros esposos están disfrutando a full sus últimos días de soltería, habían decidido casarse ese mismo fin de semana, después de el hermoso regalo de san Valentín que se habían dado mutuamente, pero la necesidad de estar piel contra piel los había vuelto locos y en medio de la carretera no soportaron y ahora estaban escondidos en medio del bosque, mientras su auto se movía al compás de sus cuerpos. Las ventanas estaban empañadas y los gemidos de ambos era lo único que se escuchaba en ese lugar.- Quiero... más... mucho... más - gemía ella, mientras su hombre la tomaba de la cintura para acomodar su pelvis.- ¿Serás... así... de exigente... en todo el... embarazo?- No... te... quejes... Ah... Sí... así... sigue así.El choque entre sus cuerpos y la necesidad de liberar todo lo que sentían provocó que las estocadas de Agus fueran más fuertes y certeras, el cuerpo de Daria se m
De que han pasado muchas cosas en este último año no podía discutirlo, pero si miraba hacia atrás no me arrepentía de absolutamente nada.Pasamos por momentos muy difíciles, sobre todo nuestro amigo Rubén, perder a un ser amado era difícil, pero perder al amor de su vida debe ser un dolor inconmensurable.Eso pasó unas semanas después del ataque a Brianna. Ese día ella despertó como lo había hecho yo y creo que todos fuimos felices por ellos, es que su amor era infinito y ambos estuvieron ese día junto a sus pequeñitos disfrutando de ese hermoso amor.Lo peor, sucedió antes del anochecer, Brianna se fue apagando de a poquito y Val nos llamó, aunque yo no tuve el gusto de conocerla, lo sabía a través de los chicos, ella era una mujer excepcional. Cuando entramos a la habitación el grito desgarrador de nuestro amigo nos hizo correr hacia él y, entre mi Agus y Jex lo sujetaron.Escuché las palabras de Val y el corazón se me destrozó."Hora de la muerte, veinte treinta del diez de febrero
POR CLARA SANTILLÁNLo que pudo pasar y no fue...El día de hoy, estaba en la consulta de mi traumatólogo, sólo habían pasado unas semanas de mi accidente y gracias a toda la ayuda que recibí, podía decir que estaba viva, algo que al ver la cara del doctor Rubens, me hizo replantear si había sido lo mejor.Al final, lo que pasó fue que intenté esquivar a un camión que no redujo la velocidad, en la intersección para entrar la autopista y yo atiné a mover el volante, pero perdí el control de mi auto y desperté aquí. Por suerte no hubo más heridos o algún fallecido, solo yo que casi perdí mi brazo pues quedó atrapado entre los fierros retorcidos.Cuando desperté a la primera que vi fue a mi madre, ella estaba llorando junto a mi cama y golpeándose el pecho, de verdad que pensé que estaba muerta y que ella lloraba sobre mi cadáver, hasta que las manos de mi mejor amiga tocaron mi cabeza y la vi sonreír.-Por fin despertaste, mi colibrí.-Ro...-No hables, iré por los chicos.Desde ahí, ha
El despertar de la bella durmienteCapítulo 29Al llegar, casi al mismo tiempo, los tres amigos se encontraron en el vestíbulo del hospital. Agustín se iba a dirigir a informaciones, pero Alma lo detuvo.- Será mejor que vayamos a emergencias, ahí tendremos noticias de todo - le dijo a un Agustín muy angustiado por la condición de la esposa de su amigo.- Sí, vamos - esa era Dana, que al igual que Alma, estaban preocupadas por la salud de Clara Santillán, la amiga de Rocío.Mientras caminaban por los pasillos, las chicas no pudieron dejar de preguntarse el por qué de las cosas.Era como si la diosa fortuna les quisiera jugar una mala pasada cuando las cosas mejoraban un poco.- No puedo creer que esa pobre chica haya pasado por esto, su carrera ¡Dios, no me lo quiero imaginar! Su carrera es todo para ella.- Y espera a que se entere Ro, apuesto a que se sentirá culpable.- Ni dios lo quiera, mis sobrinitos deben estar tranquilos en su incubadora ¿Por qué tenía que pasar esto?Agustín
El despertar de la bella durmiente.Capítulo 28Narrador Omnisciente El funeral de las madres de Agustín y Lucienne fue sobrio, solo participaron los más cercanos, a los niños los habían dejado en casa con Glorita y el abuelo Agustín. el cortejo llegó al cementerio en completo silencio, no hubo discursos ni palabras para ellas, solo consuelo para Donovan, Mathew, Lucienne y Agustín.Del padre de Agustín se supo que había huido como la vil rata rastrera que era, pues "su amigo" lo estaba buscando para matarlo, era lo menos que le podría hacer a ese desgraciado cuando lo encontrara, después haber leído la carta que le dejó Sofía y enterarse de todo lo que habían hecho él y Ludovica. Por eso, a diferencia del cuerpo de Sofía, el de Ludovica, nadie lo había reclamado. Así fue como Donovan, en un acto de amabilidad con aquella chica que había acogido en su hogar, le pidió a Thomas que hiciera los arreglos para darle cristiana sepultura.Para todos, había sido complejo, pues hacia menos d
Último capítulo