— Lo siento tanto, mi Luna. Puedes hacer conmigo lo que quieras; me lo merezco. ¡Pero juro ante todos los dioses que jamás te traicioné, ni me burlé de ti! —se pronuncia sumisamente ante ella—. Yo te amo, mi Luna. Te amo. — ¡TE PROHÍBO QUE ME AMES LOBO! ¡TE LO PROHÍBO! — ¡DETENTE, ISIS! ¡LO VAS A MATAR Y A NOSOTRAS CON ÉL! —escuchó el grito asustado de Ast resonando en su mente, y por un momento, la voz de su loba logró atravesar la neblina de su furia. Isis se detuvo en seco, luchando contra el torrente de emociones que la arrastraban. Salió dando un portazo, sabiendo que si se quedaba, solo mataría, y el llanto de Ast en su cabeza la estaba destruyendo. En su mente, dejó a Jacking herido, tirado en el suelo, sangrando por todas las heridas que le había infligido, y se sintió vacía. Mientras corría por el pasillo, la rabia se convirtió en una marea de dolor y confusión. Sabía que debía calmarse, pero el caos que había desatado apenas comenzaba a asentarse en su alma. Isis estaba tan furiosa, pero tan furiosa, que la ira burbujeante la consumía desde dentro. Sabía que debía hacer algo con esa tempestad de emociones o de lo contrario, iba a explotar. Aquel furor era un volcán a punto de erupcionar, y no podría contenerlo por mucho tiempo. Con un estallido de energía, se transformó en Ast, y salió disparada hacia el bosque, dejando atrás la traición y el dolor que la habían cercado. ¡Quería escapar de esa realidad! ¡No quería verlo! Necesitaba huir, alejarse lo más posible de la fuente de su tormento. Sentía a Ast en su mente, clamando, pidiéndole que se detuviera, pero no le prestó atención. ¡Ella era una traidora!
Leer másY, con gran esfuerzo, extiende sus brazos hacia nuestra Luna. Es su madre, Amonet, que a pesar de estar muy malherida ha acudido a detener a su hija. La Luna Suprema la mira y, para nuestro alivio, deja de lanzar llamas y comienza a descender llorando. Ambos padres la abrazan y desaparecen con ella, dejando un caos detrás. Escuchamos la voz de Bennu:—¡Arriba, todos a reforzar nuestras fronteras ahora mismo! ¡Seremos atacados! ¡No hay tiempo para curarnos! ¡Tenemos que proteger a nuestras familias! El caos aún persiste. La tierra está destrozada, los árboles arrancados, y el aire, cargado de cenizas, nos dificulta respirar. Las heridas en nuestros cuerpos no sanan como deberían. Es como si la explosión magnética de nuestra Luna hubiera despojado a todo ser sobrenatural de su magia regenerativa.Bennu avanza entre nosotros, su mirada feroz y decidida. Tiene sangre en el rostro y una herida en el costado que apenas puede cubrir. Sin embargo, su voz no titubea.—¡Rápido! ¡Levántense! ¡N
RETROSPECTIVAAl llamado de nuestro Alfa Supremo, salimos a ver dónde está nuestra Luna. Es un llamado de auxilio que muy pocas veces hemos escuchado de nuestro Alfa Supremo. Estamos muy preocupados. Nos convertimos en lobos y corremos en la dirección que nos indica nuestro instinto, guiados por la enorme energía que estamos percibiendo.—¿Qué es lo que pasa, Amet? —preguntan Bennu y Horacio, corriendo a mi lado tan rápido como podemos.—¡Corran, es la Luna Suprema, tiene descontrolados sus poderes! —les informo mientras lanzo una orden a toda la manada—. ¡No le hagan daño, es nuestra Luna Suprema!—¡Se está elevando, se está convirtiendo en una Luna Suprema! ¡Mira su transformación! ¡Es realmente hermosa, nuestra Luna! —exclama Horacio mientras nos detenemos para observar, con admiración y temor, la transformación de quien, a partir de ahora, será la madre de todos nosotros.Hay júbilo en los ojos de todos los lobos de la manada, que, como nosotros, han venido detrás de nuestra Luna.
Le doy unas palmaditas en el hombro. La noche está avanzando, y el viento que corre por las montañas parece traer consigo secretos que aún no podemos descifrar. —Ya me hice cargo de eso; los tranquilicé por el momento —le cuento enseguida—. Vamos a ver qué pasa. Ahora, solo vine a ver cómo te sentías. —Estoy agotado —confiesa con sinceridad—. Voy a unirme a Jacking y descansar. —Está bien, Mat. Cualquier cosa, sabes que solo tienes que llamarme. Hasta mañana, Mat. Tengo que encontrar la respuesta a este misterio. Ojalá Jacking despierte pronto, ahora que Mat y Ast le hicieron eso. Soy su beta; debo buscar soluciones. Pero él es mi Alfa. Siempre funcionamos juntos. Sé que no es fácil de entender nuestra conexión. Pero sin Jacking, siento que falta una parte importante de mi cuerpo. Antoni debe estar esperando por mí. Pero primero miraré en la biblioteca el libro sagrado de las bestias. Quizás encuentre el porqué de que Mat se convirtiera en bestia. La noche envuelve la biblio
Me encuentro en el despacho del Alfa Supremo, tratando de que todo marche bien. También estoy revisando el libro sagrado de los Alfas Supremos, porque me preocupa mucho que Mat se haya convertido en bestia primero, antes que en Alfa Supremo. Veo llegar a Horacio. —Horacio, ¿ya terminaste de organizar a todos? —le pregunto enseguida. —Sí, ya lo hice —responde sentándose—. Ahora nos sobran casas; es que Mat hizo nuestro antiguo pueblo completo. —Mejor que sobren —le digo y agrego—. Cada día, los jóvenes se convierten en lobos y se encuentran a su mitad. Así, ya tendremos casas disponibles para ellos. ¿Dónde está Bennu? —Está terminando de reorganizar a los hombres y marcando el perímetro de la manada. Le dije que lo dejara para mañana, para que entre todos exploremos estas tierras. Pero ya sabes cómo es él —me informa sin entender la importancia de lo que hace Bennu. —No conocemos nada de estas tierras; hace bien en dejar vigilados los alrededores —le digo para que se percate—
Me paseo de un lado a otro después de dejar a Mat en la entrada. Estoy muy furiosa con mi hermano. Por mucho que trato, no puedo entenderlo. Si pudiera, lo encerraría en un lugar lejos de su Luna. Pero no puedo; él es el Alfa Supremo. Además, me dijo que toda la culpa de lo que hizo Isis era de él. ¿Qué le hicieron para que ella reaccionara así? —¡No puedo entender a mi hermano! ¡Su Luna casi lo mata, casi nos mata a todos! ¡Y él dice que es su culpa! Me detengo un momento, mi cuerpo emana una energía tan intensa que las luces del despacho parpadean. Mi mente es un remolino de pensamientos caóticos mientras intento contener la explosión que se avecina dentro de mí. —¡Es una locura! —grito, lanzando una pila de papeles al suelo—. Mat puede salir de control en cualquier momento. Su vínculo lo está destruyendo. Y, peor aún, podría destruirnos a todos. Me muevo por todo el despacho, como una fiera enjaulada. Entro en el cuarto secreto. Héctor duerme aún, pero al sentirme, abre los
No entiendo lo que quiere decir papá. Miro a Mat, que se está convirtiendo en una bestia fuera de control. Rápidamente lo comprendo y choco mi hocico con el de Mat, le relamo toda la cara y restriego mi cuerpo contra el suyo, soltando feromonas. Los ojos de Mat vuelven a ser dorados. —¡Gracias, mi Alfa! ¡Amonet está mucho mejor! —mi papá vuelve a inclinarse delante de mi Alfa, emocionado. Mat aún respira de manera agitada. Lo siento temblar bajo mi cuerpo mientras sigo frotándome contra él, intentando calmarlo con todos mis sentidos. Su esencia, normalmente cálida y protectora, aún parece inestable, como si una tormenta se arremolinara muy dentro de él. —Ast... no te detengas todavía —dice con voz ronca, un gruñido bajo que me eriza los pelos del lomo. Sigo obedeciendo, incluso cuando siento mis patas debilitándose por el esfuerzo y el cansancio. Pero no puedo parar, no cuando sé lo que podría pasar si mi Alfa pierde el control. Finalmente, sus latidos comienzan a ralentizarse,
Salgo de la cueva; es de noche. Está nevando. Camino con cuidado hasta llegar a unos árboles. Tengo que saber dónde está Mat. Isis no quiere buscarlo, pero yo lo haré. ¡Curaremos a nuestro humano! ¡Y a nuestra madre! La cabezota de Isis no debe saberlo. ¡Oh, parece que se acerca alguien! ¡Ese olor, es Mat! ¡Mat, es Mat! —¡Mat, Mat! ¡Soy yo, Ast! —corro feliz a su encuentro. —¡Ast, mi Luna! ¡Qué alegría me da verte! —exclama al verme y roza su cuello contra el mío. —¿Cómo estás? ¿Te sientes bien? —¡Oh, Mat, discúlpame! ¡Todo fue culpa mía! ¡Isis no paraba de llorar! ¡Y yo hice que se diera cuenta de que Jacking era nuestro humano! ¡Debí esperar a que él se lo dijera! —exclamo enseguida porque no quiero que se moleste conmigo. —Está bien, mi Luna. Lo arreglaremos —dice y me llena de alegría. —¿Cómo está tu mamá? —¡Está muy mal, Mat! ¡No ha recobrado el conocimiento todavía! Cada día la siento más débil —le cuento, realmente preocupada. Tengo miedo de que mamá muera. —¿Crees qu
No he vuelto a salir después de mi pelea con mi Alfa. Nos trasladamos con mis padres a una cueva muy profunda y medicinal. Colocamos a mi mami en una burbujeante fuente termal. Está más que delicada; perdió el conocimiento. Por mucho que he tratado de sanarla, no lo logro. Cierro la entrada de la cueva y me niego a ver o recibir a nadie. Así nos pasamos los días sin tener conexión alguna con el exterior. No sabemos lo que está pasando en la manada. Mi padre me mira todos los días sin decirme nada. Pero yo sé lo que quiere. No lo voy a negar, yo también lo quiero. Quiero salir corriendo a llamar a mi Alfa para que me ayude a sanar a mi mami. Pero mi padre me ha dicho que está inconsciente. Por poco lo mato. Ast está muy molesta conmigo; ella no me entiende. Practico el autocontrol con mi padre todos los días, pero hay algunos poderes que debo practicar con el Alfa
El Alfa se queda en silencio por unos segundos, sin desviar la mirada de su hermana. Finalmente, se acerca y choca la frente con la de su hermana. Sin embargo, en el silencio de su mente, algo late con fuerza; el vínculo con ella sigue siendo profundo e indestructible.—Mert, mi humano está dormido. Sus heridas ya sanaron, pero no despierta. Traté todo este tiempo de hacerlo despertar, pero no lo logré —explica con tristeza.—¿Entonces, qué debemos hacer? —pregunta ella con ansiedad.—Mert, vamos a concentrarnos ahora en esto. Después, veremos cómo lo ayudamos —se detiene un momento mirándola a los ojos. Puede ver que está asustada, pero decidida a ayudarlo—. Tengo que pedirte que te mantengas siempre a mi lado, Mert. ¡Eres la única, además de mi Luna, que puede evitar que me convierta en una bestia, y Jacking desaparezca!&mda