Cecil mantiene una relación de un año con un hombre de 32 años que conoció usando una aplicación de citas. Cansada de estar sola, ya que el vive en el en otro estado, decide viajar a New York para que finalmente puedan estar juntos, pero cuando lo busca se entera de que el no es quien dice ser y además está casado, convirtiéndola a ella en su amante.
Leer másNarra CecilTodo estaba listo para recibir a Aurora. Después de terminar la escuela decidió seguir los pasos de Leah y estudiar para ser modelo, mientras que Aria, siempre tan determinada, tomó el mando de la empresa de mi esposo con una madurez que aún me sorprende. Mis bebés, aunque ya no son tan pequeños, Alex y Alessio, se quedaron en casa conmigo. Alex ya está en su segundo año de universidad y Alessandro cursa su último año de escuela.No puedo quejarme. Con altos y bajos, mi vida ha sido feliz y plena al lado de mi guapo esposo, Alexander Segundo, como le digo en tono de juego, porque nunca le cambiamos el nombre a nuestro Alex, y en casa terminamos llamándolos Segundo y Tercero para no confundirnos.Alex, mi hijo, es un calco de su padre. Mismo carisma, misma sonrisa que desarma, misma facilidad para meterse, y salirse de los problemas. Me encanta verlo tan lleno de vida, pero también me asusta. Sé muy bien lo que su padre fue capaz de hacer con ese encanto suyo. Por eso a ve
Match para siempre Narra CecilDesde el balcón, con una taza de té caliente entre mis manos, observo cómo todos corren de un lado a otro terminando de decorar el jardín para los siete años de Aurora. El aire huele a pastel y globos inflados con risas. Y yo, aquí arriba, sólo puedo sonreír.La vida no me pudo haber dado una mejor familia. Ahora lo entiendo… ahora todo tiene sentido. El por qué nunca encajé con mis padres, por qué siempre me sentí ajena. Era porque mi lugar no estaba allí… estaba aquí.En esta familia encontré el significado del amor. No el amor de cuentos de hadas, sino el verdadero. Ese que cuida, que protege, que permanece incluso cuando el caos se asoma. Ese que se construye todos los días entre pañales, abrazos y desayunos a medio comer.— Mami, mami — me saca de mis pensamientos la voz dulce de mi pequeño Alex, corriendo con sus manitas entrelazadas a las de su papá, mi guapo esposo — Bebé —dice, señalando mi barriga redondita.Nos prometimos que tres serían sufi
La iglesia está en silencio. Un silencio sagrado. Solo el murmullo de los corazones acelerados y las emociones contenidas llenan el aire.Primero, Alex y Cecil se miran como si el mundo se hubiera detenido en ese instante.Él le acaricia la mejilla con una ternura que desarma, ella le sonríe con lágrimas en los ojos.El sacerdote les da la bendición final y, por fin, pronuncia las palabras más esperadas:— Ahora pueden besarse.Alex no lo piensa dos veces. Toma el rostro de Cecil entre sus manos y la besa como si fuera la primera y la última vez.El beso es suave, profundo, lleno de historia y redención. Las promesas están selladas. El pasado queda atrás. Y en ese beso está todo: el amor que nació con un perfil falso, la lucha por estar juntos, las niñas, las segundas oportunidades… la certeza de que esta vez, es para siempre.A unos pasos, Mario no aparta los ojos de Leah.Ella lo mira con esa mezcla de dulzura y fuego que siempre lo ha hecho perder el aliento. No necesitan decir nad
POV AlexMe cuesta hablar. Porque todo en este momento me desborda. El verla frente a mí, tan hermosa, tan valiente… tan mía. El corazón me late con fuerza, y siento que si no lo digo bien, no voy a poder perdonarme. Porque lo que siento por ella… no se resume fácil.Tomo aire. Aprieto suavemente sus manos. Y le hablo con el alma.— Cecil…— Desde el primer instante que te vi, supe que mi vida no volvería a ser la misma. Fue como si el mundo, con todo su ruido, se callara. Y solo estuvieras tú. Solo sabía tu nombre, y ya me encontraba mirando tu foto día y noche antes de mandarte el primer mensaje. No sabía tu historia, pero mi corazón te reconoció. Y desde entonces, nunca más volvió a soltarte.Hago una pausa. Mis ojos ya están llenos de lágrimas, pero no me importa.— Amarte ha sido el viaje más honesto, más duro, y más hermoso de mi vida. No siempre supe cómo hacerlo bien. No siempre fui valiente. Fui cobarde. Te mentí. Me escondí detrás de un perfil falso, con miedo de que, si me
POV Cecil — No, no, buscaré ayuda dame un momento — dijo pero negué. — ¿Qué? ¡Cecil, no! ¡No digas eso! — responde Leah con urgencia, acercándose a mí — Esto se puede solucionar. Déjame traer un pedazo de tela. — No me casaré con un vestido parchado, Leah — dije con firmeza, “conteniendo” las lágrimas que no iban a salir de mis ojos — No así. No como esto. No es justo para nadie. Mejor… mejor ponte tú el vestido. Lúcelo tú. Aprovecha el momento. Yo ya gasté todos mis ahorros, no pienso dejar que todo esto se pierda.Leah se queda helada, entre confundida y preocupada. Se nota que quiere consolarme pero no sabe cómo. Su rostro oscilaba entre la incredulidad y la emoción. Bajó la vista al vestido, lo acarició como si de pronto fuera frágil.—¿Cecil… estás segura? — preguntó en voz baja, como temiendo la respuesta.Asentí con una leve sonrisa, tratando de no quebrarme. No podía dejar que mi plan se arruinara ahora.— Sí, Leah. Estoy completamente segura.Ella respiró hondo, como si in
POV Alex —¿Preparaste todo esto… para mí? —pregunta Cecil, y su voz suena como si no terminara de creérselo.Asiento lentamente, sintiendo que el corazón me late tan fuerte que podría escucharlo ella también.—¿Lo hiciste porque discutimos hace poco? — insiste, con una mezcla de ternura y duda en los ojos.— No, amor… — respondo con la voz apenas firme — Esto no es por la pelea, ni por culpa, ni por presión.— He estado planeando esto desde hace meses. Me tomó casi dos meses conseguir los permisos, encontrar este lugar, pensar cada detalle. Estaba tan nervioso… nunca había hecho algo así, no sabía si era suficiente, si te iba a gustar. Solo quería que fuera especial.— Mi idea era contarte sobre el divorcio hoy, justo ahora, cuando estuviera todo listo. Pensé que te sorprendería… pero al final, el sorprendido fui yo. Ya lo sabías.Ella se queda en silencio por un instante, y siento que todo se detiene. No sé si está decepcionada, conmovida, o a punto de decir que no. Solo espero.Has
Último capítulo