Olivia Walton juró nunca permitir que su vida fuera negociada cual contrato. Inteligente, ambiciosa e indomable, sabe que Nueva York es un campo de batalla… y ella, una guerrera. Pero su abuelo le impone una estrategia: casarse con Liam Macmillan, el arrogante CEO. Su némesis. El hombre que siempre la hizo hervir de rabia... y deseo. Obligados a compartir la firma y el lecho, se enfrentan a una guerra de poder tan peligrosa como erótica. Un matrimonio sin amor se convierte en un vínculo inquebrantable, alimentado por una pasión oscura, salvaje e innegable. Descubrirán que el verdadero riesgo no es perder la firma… Sino entregarse por completo al único enemigo que no pueden vencer: su propio deseo. “Un latido después, Liam la tenía contra la pared, su cuerpo duro presionándola hasta robarle el aire. —Esto no cambia nada —gruñó contra su oído, su voz rasposa y peligrosa. —No —jadeó ella, pero su cuerpo ya se arqueaba hacia el suyo, traicionándola. Sus labios chocaron con furia, Liam deslizó la mano bajo su blusa, arrancándole un suspiro ahogado cuando sus dedos atraparon uno de sus pezones endurecidos. Olivia se estremeció, aferrándose a sus hombros mientras él la alzaba, envolviéndole las piernas en la cintura sin romper el beso. —Mía —murmuró contra su garganta, deslizando su lengua en una línea abrasadora hasta su escote. En un movimiento brutal, la penetró de una sola embestida profunda, arrancándole un grito ahogado que se perdió en su boca. Olivia arañó su espalda, perdida en el ritmo salvaje de sus cuerpos, como si fuera el único derecho que alguna vez reclamaría sobre ella. Porque en medio del odio, de la traición, del deber... Su pasión era la única verdad imposible de negar.” #MatrimonioporContrato #RomanceOscuro #Poderfemenino #CEO #Abogado
Leer más(POV Olivia Walton)La sala 17C de la Corte del Distrito Sur de Nueva York no tenía alma, pero ese día latía con fuerza propia.Podías sentirla respirar bajo las columnas de mármol, bajo los ventanales inmensos que enmarcaban un Manhattan indiferente, como si los juicios más oscuros del país fueran solo una nota al pie del caos urbano. Pero para mí, para nosotros, no era una nota. Era el núcleo. El corazón palpitante de una guerra legal que podía costarnos todo.Entré primero. Firme. Blazer negro perfectamente abotonado, cabello recogido en una coleta que no dejaba lugar a titubeos. Detrás de mí, Liam—tan impecable como siempre, pero con esa tensión apenas contenida en la mandíbula—seguido de Mateo Duncan, los gemelos Walton, Carter y Daniel. El equipo completo.No éramos un grupo de abogados. Éramos una l&iacu
Capítulo 33: Juego SucioCorte del Distrito Sur de Nueva YorkCaso No. 4572-J / Lincoln Jones vs. Departamento de Justicia de los Estados UnidosAudiencia preliminar: Alegato de defensa – Macmillan & Walton LLPNUEVA YORK. 08:30 A. M.El tribunal olía a madera antigua y tensión contenida. Las luces frías del salón no perdonaban el más mínimo temblor en el rostro de los presentes. Olivia Walton se levantó con
Capítulo 32: Bajo amenazaEl silencio que reinaba en la sala de juntas era denso, casi táctil. Como si las paredes supieran que estaban a punto de escuchar algo que no debían.Carter fue el primero en hablar. Su voz, grave y tensa, rompió el aire como un cristal astillado.—¿Estamos completamente seguros de esto?Cruzó los brazos, su expresión endurecida por la incredulidad. Frente a él, Daniel ladeó la cabeza con una mueca amarga.—Lincoln Jones no es solo un cliente. Es una bomba con traje de diseñador.Los ojos de M
Capítulo 31: ReconexiónLa luz tenue de la lámpara iluminaba la estancia, bañando el estudio en un resplandor cálido, suave. El aire parecía cargado, pesado, como si el espacio mismo estuviera esperando algo. O más bien, alguien.Me apoyé contra la puerta, observando a Liam en el centro de la habitación. El traje de ejecutivo ya estaba deshecho, la chaqueta colgada sobre una silla y la corbata medio deshecha. Los botones de su camisa estaban desabrochados, y su mirada, fija en la ventana, reflejaba esa mezcla de frustración y cansancio que ambos compartíamos.—¿Vas a quedarte ahí toda la noche? —preguntó con un tono bajo, sin apartar la vista.Mi garganta se tensó. Sabía que había mucha historia entre nosotros. Sabía que las palabras a veces no eran suficientes. Habíamos estado en guerra cont
Capítulo 30: Falsas verdades La oficina de Elijah McMillan olía a cuero caro, a whisky añejo y a secretos antiguos. Un espacio diseñado para intimidar, no para recibir visitas. Las estanterías de caoba impecable, los ventanales altísimos que dejaban filtrar una luz dorada como de vitral sagrado, y el escritorio monumental al centro… todo hablaba de poder. De control. De dominio absoluto.Elijah estaba allí, como un emperador esperando a un emisario caído en desgracia. Tenía una copa en la mano, el rostro sereno y los ojos alerta. No sonreía, pero su expresión exudaba superioridad.—Sabía que vendrías —dijo, sin necesidad de alzar la voz.Olivia Walton no respondió de inmediato. Entró al despacho como si cruzara un campo minado, con el dossier apretado contra el pecho y la mandíbula tensa. Cada paso suyo sobre el suelo de mármol resonaba como un latido en la sala enmudecida.—Entonces también sabrás por qué estoy aquí —dijo finalmente, clavándole la mirada.Elijah apoyó la copa sobre
Las luces del edificio se apagaban una a una, como si el lugar entero supiera que algo se quebraba por dentro. Olivia caminaba por el pasillo de mármol, los tacones resonando con un eco frío, metálico. Llevaba el bolso apretado contra el cuerpo, como si pudiera protegerla de lo que acababa de descubrir.En su interior, una copia de seguridad. Toda la información sensible que había compartido con Liam. Todos los documentos. Todas las evidencias. Y, sobre todo, una verdad imposible de ignorar: alguien dentro de Macmillan & Walton estaba traicionándolos. Y no desde lejos. No desde una oficina externa. No. El enemigo estaba adentro.Demasiado cerca.Demasiado personal.Horas antes, Olivia había recibido una llamada inesperada de Adrián Brown. Su tono no dejaba espacio para preguntas.—Necesito verte. Es urgente. Café Rinaldi, frente al parque. Media hora.Lleg
Capítulo 28: El peso de la sangre(POV Olivia Walton)—Tú sabías todo esto… —dije en voz baja, temblando por dentro—. Y aún así lo permitiste.El despacho de mi padre olía a madera vieja, a poder rancio y a traición. Las persianas medio bajadas dejaban pasar la luz justa para que todo se sintiera más oscuro. Como él.Benjamin alzó la vista de sus documentos como si mi voz fuera una molestia. Llevaba ese aire de superioridad que siempre lo había rodeado como un escudo invisible.—Ten cuidado, Olivia. No sabes de qué hablas —respondió, frío, calmado.—Sé exactamente de qué hablo. Sé lo que hiciste hace cinco años con los contratos de BlueShield. Sé que manipulaste la venta de acciones en Hamilton Biotech para beneficiar a los Kirklan
Capítulo 27: Instinto animal(POV Liam Macmillan)La lluvia no caía. Se estrellaba. Contra el parabrisas, contra el techo, contra mi paciencia.Golpeaba como una maldita advertencia del universo.No tenía por qué estar ahí.No tenía por qué seguirla.Pero desde que Olivia salió de la oficina con esa mirada baja y el teléfono apretado contra el pecho como si escondiera dinamita, supe que algo no estaba bien. Que algo se me estaba escapando.Y eso me revienta más que cualqu
Capítulo 26: El confidentePOV Olivia WaltonEl silencio de Liam me pesaba como un juicio no declarado.No hacía falta que gritara. Ni que reclamara.Le bastaba con esa forma en la que ya no me miraba. Como si algo dentro de él se hubiese roto… y yo fuera la responsable.Desde aquella noche, he vivido en un limbo asfixiante.Su silencio es más cruel que cualquier palabra hiriente.Y lo peor no era que dudara de mí.Lo peor era que… yo también empezaba a dudar de él.