Ryan Connor, un gran magnate con poder y dominio propio, es un hombre dominante, posesivo, controlador, apasionado y muy enamoradizo. Él es un hombre empedernido en la pasión, pero no contaba en encontrarse a la mujer que le dará un revuelco a su corazón. Adara es la mujer que se le incrustó en su corazón sin permiso alguno, ella es la única que lo hace estallar en miles de emociones, provoca la adrenalina y el ritmo cardíaco acelerado, pero también es la perdición, el descontrol, la desesperación y el Karma en persona. Antes que llegara Adara a su vida estaba Kiara, Kiara es la novia oficial de Ryan y la mejor amiga de Adara. ¡No existe el poliamor! ¡Existe el Karma!
Ler maisEn lo más alto del cielo están los donadores del amor: los que dan amor temporal moran en las infinidades del más allá. Los que dan amor puro y para toda la vida son los que moran en la vida eterna. El que te da amor sincero por primera vez se vuelve el primero en tu corazón: el que trae el amor se vuelve el dueño de tu corazón y el amor se vuelve nuestro alimento, que es nuestra vida y espíritu.
El Karma se ha vuelto mi aliado y confidente, aunque no lo quiero en mi vida él me persigue hasta las profundidades del abismo. Mi vida sería fácil si no me hubiese tropezado y hubiera ignorado al gran Dios griego que cruzó esa gran muralla, en ese mismo instante mi corazón dio un revuelco y mis ojos se hipnotizaron provocando que renuncie a todos mis principios y tolerando que mi corazón y mi dignidad sean masoquista.
Mi corazón se aceleró al ver esa mirada penetrante y ese cuerpo sensual y escultural, por un momento mi corazón se estaba adueñando de algo que no era mío, la vida, el destino y el propio Karma me demostró que el gran amor de mi vida le pertenecía a mi gran amiga Kiara. Mi mundo se derrumbó y me maldigo una y otra vez, porque soy la mala hierba que traicionó la confianza y el gran amor de una amiga ¿Cómo pude ser capaz de enamorarme de un hombre prohibido? Mi conciencia me recuerda la traición una y otra vez.
Perdida en mis pensamientos no me percate cuando unas manos se apoderaron de mi brazo, siento como me estrujan y me jalan con fuerzas hasta arrastrarme hasta un callejón sin iluminación y con un silencio rotundo, el pánico y mis nervios se hacen presente, siento que me empujan bruscamente contra la pared, me sujeta la cara entre sus manos, obligándome alzar la vista y sentir su respiración acelerada, siento reconocer ese aroma que invade mis fosas nasales. Yo jadeo y su boca se apodera de la mía, me besa con violencia y se me dificulta seguir el ritmo.
El deseo estalla por todo mi cuerpo como las bombas nucleares, respondo a sus besos con el idéntico ardor, entrelazo mis manos en su cabello y él desliza una mano por mi cuerpo, hasta llegar a la parte de arriba del muslo.
Ryan Connor mi gran perdición, él interrumpe el beso y yo me quedo con más ganas de sentir y de ser poseída, tengo mi boca entreabierta e intentó recuperar el aliento y dejar a un lado el deseo de la pasión acompañada de mucha lujuria.
—Tú… Eres… Mía —gruñe, enfatizando cada palabra, pero mi autocontrol volvió a mí y se apoderó de todo mi ser.
—Eres un imbécil, como me puedes decir que soy tuya, tú tienes novia y esa novia se llama Kiara… —siento un nudo en mi garganta—. No podemos estar juntos y tampoco tenemos oportunidad, ella es y será tu novia oficial y yo...—tomo una bocanada de aire—, ya no seré la otra—lo empujo lo más que puedo, no quiero que esté cerca de mí, no quiero que me siga lastimando y de paso ambos lastimemos a mi gran amiga, no dejaré una amistad de años por un hombre que no sabe lo que quiere, él la eligió a ella y tiene que estar con ella.
—Me importa una ¡mierda!, tú serás mía y si no te tengo conmigo nadie te tendrá, te juro Adara, que de eso me encargaré personalmente —mi furia incrementa y lo único que quiero es gritar y gritar hasta que entienda el daño que le causamos a Kiara.
—Eres un maldito egoísta, estas con mi amiga y vives con ella, me harté de vivir una vida de tres, no quiero compartirte, pero tampoco quiero lastimar a mi amiga —respiro profundo, necesito aguantar y no permitir que él me enrede y me domine—. Desde hoy en adelante verás una cabrona y no una pendeja que sufre cada vez que te ve muy apasionado con otra que no sea ella.
El maldito Karma se hace presente, yo traicionando a mi amiga con su novio, y mi corazón se estruja cada vez que los ve juntos. Si el karma quiere jugar conmigo, jugaré con gusto, pero no sola, jugaré acompañada y esa persona sentirá lo mismo que siento yo. EL poli amor no existe porque los infieles y traicioneros solo somos dos y la única que está en las nubes del amor es mi amiga Kiara.
(…)—¡Acepto!—El señor confirme con su bondad este consentimiento vuestro que habéis manifestado ante la Iglesia y os otorgue su copiosa bendición. Lo que Dios ha unido, que no lo separe el hombre.Después de un año decidí casarme por el civil y por la iglesia, haciendo un pacto con Dios por la nueva vida que me ha dado, por permitirme vivir un día más con mi familia, y por celebrar nuestro amor, un amor que brota a flor de piel.Cada día soy la mujer más feliz, en compañía de mi niño Thiago y de mi esposo, oh, no olvidemos al padrino de la boda, que es más ni menos que la sombra.Mi alma y coraz&o
Adara… Mi dulce Adara.Luce tan demacrada, con sus ojitos cerrados como la bella durmiente, rodeada por toda esta tecnología. Mi corazón se estruja al verla tan frágil y a la vez tan mal. Hay un tubo en su boca, y varias líneas que pasan por gotas a una aguja en cada brazo. Una pequeña pinza está atada en su dedo.¡Maldita sea, como quisiera ser yo el que esté postrado en esa cama y no ella!Un monitor muestra su ritmo cardíaco: bip, bip, bip. Está latiendo más fuerte y estable a la vez. Me muevo lentamente hacia ella. Arrastro una silla hasta quedar a lado de la inmensa cama para un cuerpo pequeño como el de ella.
Ryan.—¿Dónde está, y acaba de una puta vez con esta incertidumbre? —me exalto.—Recuerdas la pulsera que le regalaste por saber el sexo del bebé.—Sí, lo recuerdo perfectamente —arrugo mi sien—. ¿Qué tiene que ver eso con saber el paradero de mi pequeña Adara?—Esa misma pulsera tiene incrustados un GPS —Paolo vuelve nuevamente al monitor.Me acerco a él con la esperanza de que lo que está diciendo sea cierto, quiero que sea cierto.—Su ubicación es la de St Michael 's Hospital.—Eso está a quince minutos de aqu&ia
(…)—Óscar, Adara no reacciona —la frustración y el miedo aumenta—… ¡Morirá el bebé!—¡Cálmate!, deja de desconcentrarme —grita con furia—. Quédate quita con ella mientras que yo iré a buscar un médico.Óscar sale de mi vista, y yo que medo ida ante la imagen de Adara. Óscar se encargó de acondicionar todo el lugar, por fuera es una simple bodega, pero por dentro es una casa acogedora. Óscar se preparó con todo pero menos con un médico de antemano.—Aaayyy… —se queja.—Adara… ¡Aquí estoy Adara! —me siento a la orilla d
Adara.(…)Seis meses después de crecimiento de mi embarazo y de la relación que tengo con Ryan. No imagine que encontraría estabilidad y la vida que siempre quise. Por mucho tiempo tuve una ideología equivocada y es que no cualquiera se puede adueñar tu corazón y menos dar amor sin que te nazca de corazón.Amar, querer, añorar y desear; cada una de ellas son diferentes.—Me voy mi cielo —Ryan me da un beso en la comisura de mis labios—, aunque tengo ganas de posponerlo.—No… —chillo—para ser un padre responsable, lo primero que tienes que hacer, es responsabilizarte de tu trabajo—hablo seriamente—, aparte no puedes descuidar
—Eres un inconsciente sin corazón —Anna grita como una loca—. La familia tiene que estar primero.¡Sabía que esa hipócrita no venía con buenas intenciones!—Cállate —Ryan vocifera con furor—. Qué sabes tú de amor o de principios de una familia.—Te puedo asegurar que sé más que tú —contraataca—, ya que no soy la oveja negra de la familia.—Ja, ja, ja, —ríe sarcásticamente—. No me hagas reír porque sé que perfectamente que estás más sucia que el retrete, ¡eres una mentirosa desalmada!¿Qué? ¡Por Dios! Se me ha acel
Último capítulo