Mundo de ficçãoIniciar sessãoLa vida de Erick y Anastasia da un giro radical con la muerte de Anthony Russo, sus planes para formar una vida feliz cada vez se ven más lejanos y deben estar más unidos que nunca para que la presencia del verdadero Máximo Russo no haga temblar los pilares de su relación.
Ler maisEl cielo nublado reflejaba los más puros sentimientos de la mayoría de los presentes en el funeral de Anthony Russo, al igual que el color negro, presente en la ropa de los asistentes.
— Estamos aquí reunidos para recordar a un hombre, un gran hombre cuya única meta en la vida era asegurar el futuro de su familia... Alguien entregó cuerpo, alma y mente a su compañía, por la que tanto había trabajado... — El cerebro de Anastasia se desconectó justo en ese momento.
La muerte inesperada y repentina de la cabeza de los Russo sacudió al mundo entero, quien jamás se esperó que alguien cuya buena salud era notoria falleciera repentinamente.
Por esa misma razón los rumores comenzaron a expandirse como un gran incendio alimentado por gasolina, no corrían en una buena dirección, acribillaban a la familia mientras alegaban el asesinato de su patriarca.
Y su esposo era quien quedaba en el centro de las miradas acusatorias.
Miró de reojo a Erick, quien todavía no quitaba esa expresión conmocionada de su rostro, la cual cargaba desde el momento en que vio morir a su padre con sus propios ojos, estaba en shock, pálido, con grandes ojeras debido a las noches sin dormir y con los medios de comunicación pisándole los talones haciéndole preguntas invasivas cuando ni siquiera él estaba seguro de lo que había ocurrido.
— Todo estará bien... — Anastasia trató de consolarlo, pero él ni siquiera apartó su mirada del ataúd.
La escena le dejó un mal sabor de boca, nunca había visto a Erick tan embelesado ni tampoco había algo que pudiera hacer más que tomar su mano y guardar silencio hasta el momento en que decidió hablar luego de pasar varios minutos observando la urna.
— Realmente no puedo creer que haya muerto. — Murmura, mil veces se había imaginado el día en que se celebrara el funeral de Anthony Russo, pero ahora que ese día llegó tenía una extraña sensación vacía. — Por alguna razón no se siente como la libertad que siempre estuve deseando, él murió y se libró de todo tranquilamente pero yo debo continuar y simplemente olvidar el pasado ¿No crees que eso es muy injusto?
Anastasia lo miró de vuelta, siempre supo que el semblante de Erick no se debía a la tristeza ni mucho menos a la nostalgia, no creía que muchas personas allí presentes de verdad se lamentaran de la muerte de su patriarca.
— No hay nada más que podamos hacer ahora, Anthony ya está muerto. — Solo quedaba resignarse.
Erick guardó silencio.
En ese momento un hombre de mediana edad se abrió paso en la multitud, situándose justo en frente de todos. Vestía de traje y corbata, a semejanza de la mayoría de los presentes, con la excepción de que entre sus manos traía un portafolio.
— ¿Y ese quién es? — Preguntó Anastasia, viendo cómo la atención de todos iba dirigida hacia ese hombre.
Kailani, que estaba justo a su otro lado, fue el que le dio la respuesta. — Se trata de Billy Joe Jr. El abogado predilecto de mi padre, han estado trabajando juntos desde hace décadas.
— Se ve como un hombre ordinario.
— Es el mejor abogado de la ciudad, el único hombre al que mi padre le confiaría algo tan importante para él como lo era su testamento.
— ¿Su testamento? — Preguntó ella — ¿Eso quiere decir que...?
Kailani asintió.
— Billy Joe Jr. está aquí para leernos el testamento de nuestro padre.
En ese momento Hunter los silenció a ambos llegándoles por la espalda justo en el momento en que el testamento estaba por ser leído.
— Como todos saben Anthony Russo confió en mí al momento de hacer su testimonio, algo que para él era de suma importancia. A continuación vamos a leer cuál era la voluntad del señor Russo. — Billy sacó de su portafolio una hoja que parecía pergamino y sus anteojos, la tensión se supo concentrar en el ambiente — ''A mi familia y amigos, que me han apoyado siempre. Si leen esto es porque yo ya no estoy entre ustedes, al menos no en vida. Solamente espero que tengan la tapa del ataúd... Cerrada.'' — Billy Joe se giró hacia la urna, notando cómo Zathrian se apresuraba en cerrarla. — ''Puesto que no quiero que me vean de esta manera, pero como nunca puedo esperar nada de ustedes al menos tengo la esperanza de que no me hayan dejado como a un payaso de circo.''
Anastasia suspiró, ahora sí que se parecía a las palabras de Anthony.
— ''Ahora bien, quiero que mi cuerpo descanse junto al de mi querida esposa. Esa es mi única voluntad... Y ahora por fin voy a hablar de lo que están ansiando, es momento de empezar con la distribución de mis propiedades.''
Fue ahí cuando las cosas se tornaron realmente tensas.
Billy carraspeó la garganta. — ''Al menor de mis hijos, Kailani. Le dejo mi colección de autos deportivos, sí, la misma que él tanto me pedía desde que jugaba con autos de juguetes, úsalo sabiamente y si llegas a destruir aunque sea uno de ellos te juro que te perseguiré hasta el final de tus días.''
Kailani se agitó, ahogando su gritar emocionado cuando el agente detrás del abogado le hizo entregas de la llave que daba acceso al sótano donde se encontraban los vehículos.
— Ya sabes, Kai, tendrás un fantasma que te hale los pies por la noche asegurado en este regalo. — Anastasia Bromeó.
Kailani se ríe. — Si no podía conmigo estando en vida dudo que ahora que murió logre algo.
Hubieran continuado hablando de no ser porque volvieron a silenciarlos.
Sucesivamente Billy Joe Jr continuó con las propiedades heredadas para Zathrian, Hunter y demás miembros de la familia respectivamente.
Pero todavía no decían nada sobre la persona que estaban esperando.
Anastasia logró captar la conmoción en Erick cuando su nombre todavía no era mencionado.
— Estarás bien aún si no eres mencionado.
Trató de darle algo de consuelo, pero ella misma estaba muy nerviosa, ¿Y si Anthony le había retirado todos sus derechos en un mero arranque de coraje?
— Las cosas sucedieron tan repentinamente que ni siquiera tuvo tiempo de renovar su testamento así que se está leyendo el que escribió cuando yo tenía veinte años, las posibilidades de ser nombrado allí son casi nulas. — Respondió él con vagas esperanzas.
— ¿Y a quién tenía como sucesor para entonces?
— Máximo.
Anastasia se atragantó con su propia saliva.
— ¿Perdón?
— Mi pelea con padre de toda la vida siempre ha sido una sola: Para que quite el nombre de Máximo de su testamento y coloque el mío. Pero todavía no sentaba cabeza, por ende lo había estado posponiendo hasta ahora, que fue demasiado tarde.
— En pocas palabras...
Erick la miró de reojo. — Sí, Anastasia. Todo este tiempo solo he sido un heredero de palabra, legalmente no hay ningún documento que compruebe mi legitimidad.
— P-pero Máximo está muerto... — Mientras decía aquello trató de no morderse la lengua, mentirle de manera tan descarada a Erick le dejaba un mal sabor de boca. — Es decir ¿Su muerte no anula su derecho a la sucesión?
— Aún si fuese así probablemente designó a alguien más como sustituto.
Él pareció no tomarle importancia, pero igual se veía decepcionado, ella no sabía qué decirle para que se sintiera mejor y no tratara de ser un poco más optimista. Aunque las palabras atascadas en su garganta luchando por salir no fueron necesarias cuando su nombre resonó en los oídos de todos los presentes.
— ''Erick Russo...'' — Continuó hablando Billy — ''A mi hijo Erick le dejo todo el control y la administración de la compañía, incluida la mansión principal donde creció con sus hermanos para que viva cómodamente con la persona con quien decida formar su familia'' — Los murmullos no tardaron en hacerse presentes — ''Y absolutamente nadie tiene derecho de quejarse ante mi decisión final.''
— ¡Eso no es justo! ¡¿Dónde se supone que viviré con mi hijo?! — No tardó en gritar Lydia, la mujer que alguna vez les tendió la bienvenida — ¡Ni siquiera fui Mencionada, es obvio que ese testamento está falsificado! ¡Todos aquí sabemos que el heredero principal siempre fue Máximo y que Erick es solo su reemplazo!
— ¡Tía Lydia! — Zathrian le alzó la voz.
Aunque ella solamente dijo lo que todos estaban pensando.
— Lydia Russo... De hecho hay un pequeño anexo con su nombre, pero me pareció demasiado irrespetuoso decirlo en frente de todos, pero si usted insiste... — Comentó el abogado, dispuesto a seguir hablando. — ''Para mí repulsiva cuñada Lydia y su engendro lame botas, a ellos les dejaré la casa sur con el fin de que abandonen mi hogar inmediatamente. ''
Lydia casi se desplomó sobre el suelo al escucharlo. — ¿C-casa Sur? ¡¿Por qué?!
— ¿Qué es la casa del sur? — Le preguntó Anastasia a Erick.
— Es una vieja casa en un terreno baldío donde el clima es tan gélido que tu propia respiración se congela en el aire, nadie la usa desde hace décadas y fue víctima de la delincuencia, por lo que además de estar infestada de plagas no tiene más que muebles rotos que los delincuentes no pudieron llevarse. Además, la zona es constantemente saqueada por bandidos.
— ¿Y eso no es un poco cruel?
Erick y Kailani la miraron como si estuviera bromeando.
— ''Si crees que no sé sobre el hecho de que has estado vendiendo las joyas de mi difunta esposa para saciar tu hambre de lujos y permitir que tu hijo consuma y trafique drogas te equivocas, de hecho un oficial de la policía ha sido contactado para llevárselo a él y si tú no me regresas las joyas de mi mujer antes de que yo cumpla el primer año de fallecido mis escoltas irán por ti''
Anastasia suspiró, ni siquiera para su testamento tuvo una pizca de piedad.
— ''Y tras haber dicho esto me despediré de ustedes, no quedándome de otra que irme confiando ciegamente en que harán un buen trabajo...''
Y... Para sorpresa de todos los presentes el nombre de Máximo jamás fue mencionado.
Billy regresó el documento a su portafolio. — Si quieren leerlo personalmente pueden buscarlo directamente a mi oficina, el testamento fue completamente escrito a puño y letra por Anthony, por lo que no hay ningún error en él.
— Eso quiere decir que... — Murmuró Erick, atónito. — ¿Si soy legítimo?
Anastasia asintió. — Siempre lo fuiste, Erick.
Luego llegó el momento para despedirse de Anthony.
Anastasia lo miró a través del cristal cuando llegó su turno para despedirse, no importaba cuánto haya tratado, no salió ni siquiera la más mínima lágrima de compasión. No sentía emoción alguna, tristeza o felicidad, no tenía nada de eso.
— Adiós. — Fue lo único que masculló antes de abandonar su posición y retirarse de allí.
La lluvia había empezado a caer sobre todos cuando estaban por marcharse de regreso a sus hogares, todo estaba en silencio.
Pero el ruido de los paparazzis y los flashes de las cámaras encandilándolos apenas salieron fue el indicio de que su vida tal y como la conocían hasta el momento se había terminado.
En medio del ajetreo surgió una silueta femenina, elegante, una mujer adulta que arrastraba una maleta se quitó sus sofisticados lentes de sol y taconeó sus zapatos en dirección a ellos, abriéndose paso fácilmente entre la multitud.
Erick se quedó perplejo al mirarla. — Raeliana...
Ella se acercó rápidamente hacia él, desbordando un extraño sentimiento de emoción y nostalgia que causó inquietud en Anastasia, pero el reencuentro de hermanos acabó en tragedia cuando ella alzó la mano para estampársela a Erick en lo que fue una estruendosa bofetada.
El ambiente se tensó, los ojos estaban en ellos.
Y, como siempre, Anastasia solo quería acabar con todo y vivir en paz.
Pero trató de disfrutarlo, sin ser consciente de que alguien terminaría pagando con su vida el precio de sus pecados y la desgarradora verdad que comenzaba a ocultarse de la vista de todos.
Aunque, por supuesto, luego de lo ocurrido las cosas no podían continuar perfectamente.'...Y de esa manera es como uno de los imperios más grandes del mundo dentro de la industria del entretenimiento ha sido intervenido por el gobierno y posteriormente cerrado tras una rigurosa investigación que confirmó que, efectivamente el patriarca de los Russo llevaba negocios fraudulentos bajo el nombre de Russo's Company. Organización que solamente era una fachada para el lavado de dinero, sus integrantes han sido relevados de sus cargos debido al reciente cierre de RCO, pese a todo el público espectador sigue con la incertidumbre: ¿Será este verdaderamente el final de la dinastía Russo?Esto fue el noticiero 24hrs y a continuación pasaremos con-'En ese momento Erick apagó la televisión, no valía la pena seguir mirándola.— Supongo que se acabó — Musita Anastasia desde su lugar sobre la camilla del hospital al que fue llevada tras desmayarse en los brazos de Erick. — Realmente se acabó.Para
La situación era bastante tensa, casi desesperada.Nunca la había visto reaccionar de una manera similar, Anastasia se sentía extraña, estaba acostumbrada a la Edith que resolvía todo usando su astucia y que siempre daba la sensación de que no sangraría aún si le cortaban las venas.Ver a esa misma persona teniendo un ataque de crisis frente a ella fue impactante.— Ya cálmate ¿Quieres? Mis oídos se sienten aturdidos con tus chillidos. — Óscar no mostró la más mínima empatía ante el estado de Edith torciéndose en el suelo, privada en llanto mientras se halaba del cabello y empujaba a la Anastasia que quería ayudarla a que dejase de golpearse a sí misma. — No es para tanto.Entonces Edith deja de torcerse.— ¿Edith? — La llama Anastasia, estaba viéndola ponerse de pie otra vez, ni siquiera recibió una mirada de vuelta, pero no necesitaba ser especialmente detallista para notar su estado de trance. — ¿Qué estas haciendo? Regresa.Por supuesto que fue ignorada abiertamente.— No es para
Aunque gracias a la confesión de Hunter podían hacer los preparativos necesarios para intentar dar con la ubicación de Anastasia la noticia de que había estado saliendo con Edith a espaldas de todos no pasó desapercibido.— ¿Tienen todo preparado? — Pregunta Erick antes de dirigirse hacia Hunter. — Luego hablaremos sobre tu relación clandestina con esa mujer.Por el momento solo necesitaba abordar un problema a la vez.— Erick... — Kailani haló de él para poder conversar. — ¿Realmente crees que esté bien confiar en él y aceptar su ayuda? Ni siquiera tiene motivos para hacerlo ¿No crees que es sospechoso?Sutilmente las miradas de ambos se desvían hacia Máximo, que estaba a unos metros de distancia dando instrucciones en otro lado.— ¿Qué más podemos hacer si no es creer ciegamente? Aunque no sepamos la razón por la que está haciendo esto es la única opción que nos queda.No podía decir abiertamente el motivo de Máximo para hacer las cosas, menos a Kailani que era realmente joven como
Capítulos restantes para el final: 1— ¿Desde hace cuanto no salíamos a solas de esta manera? — Erick se encargó de volver a llenar la copa vacía de Ana, tenía una sonrisa boba que le pareció realmente enternecedora. — Ya nos hacía falta.Anastasia también fue contagiada por aquella euforia. — Creo que no existen dos personas que merezcan más esto.Habían sufrido mucho, demasiado de principio a fin solo habían ocurrido pequeños momentos buenos en medio de un mar de tragedias y accidentes a los que tenían que acostumbrarse y encontrar la forma de salir adelante antes de ser consumidos, por esa razón creía firmemente que realmente se merecían un buen y largo descanso ahora que todo marchaba sobre ruedas.— ¿Ya decidiste qué has pensado hacer? — Preguntó a Erick, hacia mucho no hablaban sobre planeas a futuro. — ¿Te quedarás con RCO o dejarás que el gobierno la intervenga para que así ni tú ni Máximo tengan que pelear?— No creo que sea momento de arruinar el ambiente hablando de negocio
Número de capítulos restantes para el final: 2***— ¡Lucien maldito bastardo me engañaste! — Alzó la voz apenas abrió la puerta de su oficina. — Ni siquiera estás lisiado.Él dejó de lado su taza de café y sonrió en dirección a Anastasia. — Deberías aprender a tocar la puerta antes de entrar ¿Qué habría pasado si me encuentras en una situación comprometedora?. — Caminó hacia la ventana por sus propios pies. — Veo que dejaste a tu perro guardián en casa ya que vienes sola.Fue muy difícil convencer a Erick de que podía cuidarse sola y que él tenía que esperar afuera, todavía no sabía cómo enfrentar a los hermanos juntos así que lo mejor era actuar como intermediaria entre ambos.— No me cambies la conversación. — Contestó. — Erick no tiene nada que ver en esto, él todavía no sabe nada.Lucien se rió con sarcasmo. — ¿Realmente pretendes que me crea eso? No soy un tonto, Anastasia, tú mejor que nadie deberías haberlo sabido. Realmente sabía que regresarías... Pero, — Sacó su arma con si
No recordaba cuándo fue la última vez que asistieron a un evento social, pero ahí estaban, con una sonrisa en los labios mientras trataban de beber de la copa de vino y conversar entre ellos.— Esto es tan incómodo... — Señaló Erick, intentando aflojarse el nudo del corbatín. — No somos los organizadores del evento pero estamos recibiendo toda la atención.— No tenemos otra opción, el abogado recomendó no escondernos y mostrarle al mundo que no nos está afectando esta situación. — Vuelve a explicarle con calma, pero el terco Erick no lo aceptaba. — Sé que es tedioso pero debemos aparentar que todo está en orden ¿De acuerdo?Solamente así logró que asintiera.Habían asistido a una pequeña celebración organizada por un casi desconocido productor -Ya que asistir directamente a la fiesta de un pez gordo habría sido un suicidio social- donde creían que pasarían desapercibidos, pero definitivamente las cosas no sucedieron de esa forma.— De todas maneras no creo que haya nadie que se atreva
Último capítulo