Bruno Cicarelli es el mayor de cuatro hijos. Todos pensaban que su vida era normal en Italia y que haría lo que el deber ser le impondría, pero Bruno no pensaba así. Después del gran altercado que sostuvo con su padre toma su preciada bella y sus pocas pertenencias y vuela hacia la gran manzana, para cumplir su sueño. Bruno, hoy es uno de los mejores cardiólogo de la ciudad de Nueva York. ha disfrutado de la vida, del amor y de la amistad, pero hay algo que siente que le falta... El excelente chef, cantante, cotilla, pero sobre todo mejor amigo de los chicos Scott por fin ve nacer su historia. ¿Se atreven a leerla? ------------ "Con una hija a la cual puede perder, un amor de su juventud, que aunque lo haya ocultado en el fondo de su mente y corazón. Siempre ha estado ahí persiguiéndolo como un fantasma. Bruno Tratará de rearmar su vida. Lo más triste es que hay más fantasmas y monstruos en el pasado de Bruno, de los cuales le gustaría escapar. Y, aunque le duela, Hanna no era uno de ellos.” ( instigadora...Valery Archaga). Portada Irma Pérez @mis70 libros. Ideas locas: De quién las escribe.
Leer más—Bruno Cicarelli—
Hola a todas y a todos, para los que aún no me conocen soy Bruno Cicarelli, médico cirujano y residente del hospital general de Nueva York.
No... no... esa no es la forma de presentarme a tod@s, demasiado formal, es más de Ethan que mía.
A ver, vamos con la segunda....
Soy guapo, atrevido, un excelente chef y me encanta la vida, me merezco mi historia ¿no? Pues claro que me la merezco, he estado metido en tantos dramas los últimos años, que ha llegado el momento de contarles que ha sido de mi vida y mi propia historia.
M****a, esa tampoco me gusta. Van a pensar que estoy buscando pareja o algo así , peor pensarán que estoy necesitado y eso es lo que menos quiero ahora.
Veamos. Todo de nuevo. Respira Bruno.... Inhala... Exhala...
Hola, soy Bruno Cicarelli, médico cirujano cardiotorácico y residente del Hospital General de Nueva York, Un hombre guapo, atrevido, excelente chef y me encanta la vida.
¡Eso!
Así me gusta más....
Ahora ¿con qué sigo? ¿será bueno contar una de esas cosas?
Qué más dá, una de las cosas que, en algún momento escondí, es el hecho de que me gusten tanto hombres como mujeres y eso no creo que sea un problema para nadie ¿no?
¡Ay Bruno para todos!
Salí de Italia escapando del yugo de mi padre y mi madre me acompañó en esta travesía dejando todo atrás, pero el destino me la arrebató producto de un infarto, a los pocos años de estar en este país.
Después de esa gran perdida, salí adelante gracias a mis amigos y debo decir que mi vida era buena y comenzó nuevamente a florecer profesional y personalmente.
En mis años de universidad estuve muy enamorado de Dylan, creía que llegaría a ser mi primer y único gran amor, pero también en ese tiempo, hubo otra persona a la cuál amé. Aunque, por azares de la vida o el maldito destino y mi estupidez nos separaron.
Lo que no esperaba es que por esos mismo azares de la vida y después de 8 años nos volviéramos a reencontrar. Desde ese día, mi mundo de "viva la vida loca" se derrumbara en un abrir y cerrar de ojos.
¿Por qué se preguntarán ustedes? pues, porque las cosas no serán como me esperaba, sobre todo al conocer a esa pequeña chiquita que llega junto con ella, mi hija…
Con un pasado a cuestas y muchas cosas en qué pensar, necesito desahogarme y contarles mi historia ¿se atreven a leerla?
Esta es mi historia, una en la que me quedé solo, o eso pensaba, pues después de las muchas pérdidas que he tenido, me di cuenta que hoy tengo más de lo que alguna vez quise o siquiera había soñado.
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"Con una hija, que puede perder, un amor de su juventud, que, aunque lo haya ocultado en el fondo de su mente y corazón. Siempre ha estado ahí persiguiéndolo como un fantasma. Bruno, tratará de rearmar su vida. Lo más triste es que hay más fantasmas y monstruos en su pasado de los cuales le gustaría escapar. Y, aunque le cueste aceptarlo, Hanna no era uno de ellos.”
(Valery Archaga).
Su risita sugerente me hizo pensar, a la mierda con todo, me levanté de la mesa y fui corriendo tras ella, se veía tan linda concentrada en llevar las arvejas o el choclo que me dio risa, me acerqué a ella por detrás y la abracé. -¿Sabes lo que viene aparejado a una reconciliación mi diosa de ébano?- se dio la media vuelta y me miró con esos ojos verdes que ahora parecían dos lucesitas incandescentes. -¿Nos hemos reconciliado?- me pregunta en tono sugerente a lo que respondo con otra pregunta. -¿ Tú que crees?- y la besé, ella se quedó un poco sorprendida, pero al continuar con el beso cruzó sus brazos en mi cuello y me dio completo acceso esa boquita suya que tanto había evocado... Una cosa llevó a la otra y ya la tenía sobre la mesada de desayuno, nalgueé sus caderas para sentarla y que abriera sus piernas a mí, nos miramos fijamente y ella con una media sonrisa coqueta me desarmó ¿Cómo me pude perder tantos años de esto? Esta mujer frente a mí había sido la dueña de más de algu
-Bruno Cicarelli--De que me gustas ¡Maldita sea! -Lo había dicho y es como si un elefante se hubiera levantado de mi espalda, que paz y tranquilidad que sentí- ¡Dios wow, lo dije! Fue el segundo grito eufórico, cómo me había costado decir esa frase, no por ella, sino que por mí, era un cobarde con letras mayúsculas, negrillas y subrayado, tenía miedo a que ella se burlara de mí y me enrostrara mi bisexualidad o que me estaba aprovechando del momento. Todos estos años que hemos convivido como "papás/amigos" han sido un verdadero suplicio, verla en las mañanas salir media dormida con un simple pantaloncito corto o esas poleras de pabilo que tanto le encantaban cuando la conocí no ayudaban mucho y ya parecía monje tibetano de tanta ducha fría y sequía emocional. Era un masoquista en potencia y me las aguantaba, no niego que los primeros años si me dejé llevar por la carne y tuve mis encuentros con algunos personajes bastante variopintos, pero cuando llegaba a casa sentía que la había e
Pasaron unos cuantos segundos y sólo pude abrir los ojos cuando sentí la mano de Bruno en mi cara.-¡Ah, nos salvamos de esta! ¿ Estás bien? ¡Hanna, responde!-E... estoy bien, estoy bien auch-Bruno se había soltado el cinturón de seguridad y me revisaba por todos lados, yo estaba en shock, sentía el dolor en mi hombro por la marca de mi cinturón de seguridad.-¡Mierda Hanna! Será mejor que vayamos al hospital.- estaba tanto o más asustado que yo y claro, la habíamos sacado barata, estábamos en el costado de la autopista después de casi chocar frente a frente con un camión.-Es sólo una molestia, por el efecto látigo del cinturón de seguridad, no es nada, Bruno. De verdad que no ha pasado nada, gracias a dios, así que sigue adelante que no quiere posponer más esta conversación.- espeté en tono molesto y adolorida.Él me miró más molesto aún, pero no lo dejaría escapar más, estaba harta de todo esto, de seguir escapando de mis problemas y de que Bruno hiciera lo mismo.Llegamos al depa
-Hanna Sinclair-Las palabras de mi hija y de Blue me habían dejado sin forma de responder y yo que pensaba que el escándalo que había pasado hace unos minutos atrás era la noticia más importante de la noche, pues no, al final el domingo de barbacoa terminó con esas declaraciones que nos tienen a Bruno y a mí sentados en su auto, rumbo a nuestro hogar y con ellas resonando en mi cabeza y me imagino que en la de él.Después del magistral portazo que ha dado Bruno para subirse a su auto, ninguno de los dos ha dicho absolutamente nada en todo el camino, era un silencio ensordecedor. Bruno estaba molesto y yo estaba... ¿Cómo mierda estaba? No tengo la más mínima idea, esto que acaba de pasar no me lo esperaba. La verdad todo esto me superaba. Mi hija adolescente, sí, mi hija nos había regañado como niños chiquitos delante de la familia y, aunque la vergüenza me embargara, tenía un buen punto, ambos en todos estos años no habíamos cedido en nada, salvo en darle un hogar a ella.Estos años
Hanna Cicarelli Sinclair En medio de esa oscuridad escuchaba dos voces, esas de los que me amaban como yo a ellos...-¿Cómo es posible que haya caído tan bajo? -Todo esto es mi culpa Bruno, debí decírtelo, pero cuando el vino y trajo a Blue al hospital, me amenazó con nuestra pequeña y el miedo me sucumbió. -No te culpes Hanna, ninguno de nosotros la tiene y agradezco a dios que hayas podido seguir adelante sin mí, perdóname tu a mí por ser tan cara dura y no haber indagado más, si no fuera por David. -Ese es el problema con nosotros, tú no confías en mí y yo no sé lo que pasa. -Por lo pronto, quédate tranquila no haré juicios sin pensar antes y te lo suplico no me juzgues, te pido que también me entiendas, eres... No ustedes son muy importantes para mí. Los escuchaba hablar y por primera vez vi una lucecita de esperanza, mis papás me amaban y yo los amaba a ellos...Algunos años después... Estaba con Melanie comiendo un bote de helado de vainilla con galletas oreo en su casa,
Hanna Cicarelli Sinclair -Otro día más en el.hospital, otro más y se acaba, uff. ¡Vamos Hanna, tú puedes!- ese era mi lema al despertar cada mañana.¿Cómo explicar los sentimientos que tengo el día de hoy? cansancio, pena, ira, desesperación. Eran todos esos y más las cosas que pasaban por mi cabeza...Muchas veces me pregunté por qué estábamos tan solitas en el mundo con mi mamá, yo sé que ella es genial y la mejor mamá del mundo, pero éramos solo las dos y a veces eso nos pasaba factura, bueno, sobre todo a mí. Me había criado en guarderías desde que nací, pues mi mamá tenía que cumplir con sus pasantías y con los trabajos de medio tiempo que debía hacer para poder mantenernos, muchas veces dormimos en un albergue para mujeres, pues solo le alcanzaba para la leche y el pan, no soy tonta y tenía oídos sagaces y no lo entendía, mi mami sería doctora ¿por qué tanta pobreza? ¿no teníamos a nadie más?Otras tantas la escuché llorar de impotencia y de hambre, pero cada vez que se acerca
Último capítulo