EL CEO DIMITRIR DARKOK FUE OBLIGADO A CASARSE POR UN CONTRATO MATRIMONIAL HECHO POR SU ABUELO, OBLIGADO A DEJAR A SU NOVIA A LA QUE AMABA Y QUE PENSÓ JAMAS OLVIDARÍA. ANGELIC DIAMICH, LA HERMOSA HEREDERA QUE SE CONVIRTIÓ EN LA SEÑORA DARKOK, LO AMABA PROFUNDAMENTE, ELLA SE ENTREGÓ EN CUERPO Y ALMA AL FRÍO CEO, SOÑABA CON FORMAR UNA BELLA FAMILIA A SU LADO, HASTA QUE UNA NOCHE CUANDO GIORGIANA IVANOVA REGRESÓ A LA CIUDAD, EL CEO PIDIÓ EL DIVORCIO. ANGELIC, LO NUESTRO ES SOLO UN NEGOCIO, NI SIQUIERA ME HAS DADO UN HEREDERO, ADEMÁS... MI PRIMER AMOR HA VUELTO, DIVORCIEMONOS. ESTÁ BIEN, TE DARÉ EL DIVORCIO, PERO SOLO ESPERO QUE NO TE ARREPIENTAS, POR QUE JAMÁS VOLVERÉ A TU LADO DIMITRIR...
Ler maisLas dos mujeres, pero sobre todo el CEO Black se quedó sorprendido, no esperaba que su yerno quisiera nombrar al bebé con su nombre. — Lo nombraste como yo... Stella ya lloraba por la emoción, ella no habría deseado que fuera diferente. — Por supuesto, usted es un gran hombre, espero que mi hijo pueda algún día llenar sus zapatos. Y que con esto ya me acepte, amo a su hija, ella es... el amor de mi vida, es mi todo, tuvimos un desacuerdo como cualquier pareja. — Me metiste una demanda Doménico, ¿Cómo puede ser eso algo sin importancia? — Stella seguía molesta. — Solo lo hice para protegerme, conociéndote eres capaz de salir con el niño del país, y yo no los pienso perder. Me habrías hecho perseguirlos por todo el mundo. Ya perdóname mi amor, fuí un idiota, no debí enfadarme así, no te odio, nunca podría, solo estaba dolido de que me excluyeras... — Doménico, no fue mi intención hacerte sentir así, solo quería que me siguieras deseando igual, por eso no quise que vieras
Doménico se quedó en la sala de espera, como si fueran una pavada de poderosas águilas, Dimitrir, Rafael, Dominic, y Adriano De Luca, se encontraban distribuidos en los sofás, ellos no dejarían solo a su impulsivo amigo. — ¿Doménico, ya intentaste entrar a hablar con Stella? — Por supuesto, Dimitrir, pero mi suegro dijo que ella todavía dormía, no sin antes decirme que no era bien recibido en la habitación. — ¿Quién puede culpar al señor Black? Cómo hayan sido las cosas, Stella lloró mucho, la lastimaste justo el día en el que te dió a tu hijo, ahh... Apenas tu eres capaz de hacer esas hazañas. — Dimitrir, ¿Te recuerdo como te enteraste del embarazo de Vladimir? Recuerdo que te encontraste a Angelic en una reunión... — Basta, todos cometemos errores, pero no por eso vamos a perder lo que más amamos. Así que vas, vuelve a tocar la puerta, Adriano ya trajo la demanda, puedes mostrarsela a tu suegro. Doménico mal miró a su amigo Rafaela, eso iba a enfadar muchísimo al seño
La situación era bastante incómoda, los CEOS estaban sin palabras, su amigo estaba siendo prácticamente echado, su esposa no quería verlo, y por ende no podía entrar a ver al bebé. — ¿Pero qué carajos pasó aquí? Ahora los Black me van a quitar a mi hijo, y mi mujer me repudia por estar molesto por una decisión que ella tomó. ¿Cómo resulté ser yo el culpable de todo? — Porque te portaste como un imbécil al no ir a conocer a tu hijo apenas lo llevaron a la habitación, eso fué demasiado Doménico, se me cae la cara de vergüenza de esto que hiciste, ¿No tienes corazón acaso? — Lo tengo, ¿Cómo creés que no lo voy a tener? Amo a mi esposa y a mi hijo, Pero estaba muy molesto, no soy un imbécil al que pueda ignorar cuando se le plazca, ¿Estarás de acuerdo con eso al menos, o no? — Bueno, quizás en eso tienes razón pero ahora las cosas se han complicado mucho, tu esposa ya no quiere hablar contigo, la lastimaste, Doménico. — Nos lastimamos, papá, creo que Stella y yo debemos hablar
Los CEOS apenas podían creer que el nacimiento del bebé hubiese terminado en esto. — Dentro están Angelic, Emma, Kei, y la madre de Stella, también el señor Black.— Dijo Dominic mientras cargaba a su propio hijo. De pronto vieron salir de la habitación al suegro de Dom. El parecía estar muy molesto. — Doménico, por fin nos honras con tu presencia. — He venido a conocer a mi hijo, ayer me ofusqué, no estaba pensando bien las cosas, el niño no tiene la culpa de que su madre y yo tengamos diferencias. — Bueno, puedes hacer llegar tu solicitud con tu abogado, con el tiempo Stella y tú llegarán a un acuerdo, pero por el momento no vas a pasar a esa habitación. — ¿Qué...? ¿Por qué no puedo pasar a conocer a mi hijo? !Tengo todo el derecho, soy el padre, quiero verlo! — Si sabes que el niño nació ayer, ¿Cierto? Tuviste la oportunidad de conocerlo, de arrullarlo, de pasar la noche con él y con Stella, pero preferiste lárgate a beber hasta embrutecerte, dejaste sola a tu espo
El agua caliente corría por el cuerpo de Doménico, de pronto recordó lo que había pasado. El aviso de que su mujer ya había roto fuentes, cuando llegó al hospital, y como nunca fue llamado para acompañar a su esposa cuando ella daba a luz. Después de tomarse un par de analgésicos, y ya perfectamente vestido en un traje hecho a medida, bajó a hablar con su imponente padre. — Vaya, ya estás más presentable, Pero el alcohol en tu cuerpo sigue predominando al alcohol que tiene el perfume que llevas encima. — Me excedí un poco de copas, no suelo hacerlo muy seguido, pero fue como anestesiarme, ahora dime, ¿De que quieres hablar? — Sabes muy bien sobre que quiero hablarte, tú hijo nació ayer y no eres ni siquiera para ir a conocerlo, ¿Qué clase de hombre eres? ¿Cómo te atreves a hacer algo como eso? Imagínate que yo te hubiera hecho algo así, ¿Cómo me verías en este momento? — Papá, tu supiste de nosotros hasta que ya habíamos nacido, mamá no te dijo ni siquiera que estaba e
El bebé no tardó en despertar, el niño se movía de pies a cabeza, lloraba que parecía que estaba haciendo berrinche. Todos en la habitación estaban preocupados por el fuerte llanto del bebé, hasta que Dominic lo cargó y comenzó a hablarle. — Ya, ya, pequeño, estoy aquí, ¿Por qué estás tan molesto? Todo está bien, ¿Quieres que te arulle? La voz de Dominic era muy parecida a la de su hermano gemelo, el niño parecía escucharlo, comenzó a calmarse de a poco. Le dió el biberón y lo hizo dormir. — Santo dios, esto no es normal, mi nieto es un bebé muy listo, por ahora lograste engañarlo haciéndote pasar por su padre, pero... ¿Y si se da cuenta de que eres su tío y no su papá? — Es un bebé recién nacido, papá, es imposible que eso suceda. Creo que con que escuche la voz de mi cuñado será suficiente. Momentos más tarde, la bella Keinela Ivanov llegaba con su pequeño de dos años, el niño estaba muy llorón, pedía que su padre lo cargara, Kei tuvo que ir a la clínica en busca de
Último capítulo