Bebé, mamá va a cuidar de ti...
La bella Angelic, cortaba su carne con delicadeza, estaba jugosa como le gustaba. No hablaba mucho, solo estaba ahí, como una hermosa muñeca sin alma.
Los paparazzi estaban teniendo una buena racha, ellos pudieron tomarle fotos desde muchos angulos a la pareja. Ellos ya asumían que la jóven pelinegra y el empresario eran amantes.
En su despacho el CEO Darkok seguía mirando cada foto que le llegaba al celular. Como De Russie, no quitaba la mirada de su mujer, como le daba el postre en la boca y Angelic se lo aceptaba. Estaba furioso, ¿Entonces por qué fingía armarlo? ¿Por qué fingió todas esas noches que la llevaba a la locura?
De pronto le llegó un mensaje de Giorgiana, interrumpiendo sus pensamientos.
— "¿Honey, ya te sientes mejor del estómago? ¿Si quieres puedo ir a tu villa y acompañarte al hospital? Me quedé muy preocupada después de que tú vistes esas terribles náuseas.
Resultó que el CEO se había tenido que ir de la comida con su novia porque no aguantó las náuse