Sawyer inclina la cara de Lucy hacia arriba y roza sus labios con los de ella.

Un escalofrío le recorre a espalda a ella y se queda entre sus piernas cuando él hunde una mano dentro de su uniforme.

—Si necesitas un recordatorio de lo que siento por ti, estaría más que feliz de mostrártelo.

Sin darle oportunidad alguna pista responderle, él engancha un dedo en las bragas de ella, provocándola con movimientos largos y lentos. Lucy gime ante su toque de inmediato.

Todo su cuerpo responde a él como nunca antes lo había hecho con otro hombre. Solo un mínimo roce la impulsaba a desear más y más.

Quizás pensara que se trata de las hormonas del embarazo haciendo su trabajo, pero lo mismo le ocurrió la primera vez que se conocieron, y ahí no estaba embarazada.

Era todo por él, todo lo que estaba sintiendo lo detonaba Sawyer.

Era como si sus cuerpos hubiesen subido creadores para estar juntos. Como si hubiesen nacido el uno para el otro.

De la manera que fuera, en las circunstancias que fuera