Indra.

20 de noviembre 2020. CDMX.

Los gemelos dieron vueltas por todo el cuarto en sus caros trajes de la marca Balmain, en colores plateados.

Dante parecía estar peleándose con la corbata gris que intentaba ponerse. Entre risas, se la acomodé yo. Debía admitir que Dante, bien vestido y peinado, se veía aún más sexy.

Minutos después sentí que dejé de respirar cuando Sofía subió el cierre de mi largo vestido rojo, satinado y opaco, de finas mangas caídas.

—Creo que lo pedí demasiado chico —dijo Sofía entre risas. Yo solo alcé las cejas en señal de estar de acuerdo.

La pijama de Sofía resplandecía entre todas las caras prendas que revoloteaban a su alrededor.

Por supuesto, Dante no la dejó atender la elegante cena privada para celebrar la inevitable victoria de Iván Borojez como futuro presidente de la República.

—El helicóptero está listo. El Chino ya los está esperando ahí —dijo Luka, entrando al cuarto también en ropas casuales.

Después, Luka cargó a Fara entre sus brazos y Dante a