Jackson cerró los ojos y suspiró antes de correr, no quería desperdiciar la oportunidad que se le había dado.
Oficialmente estaba a pocos pasos de ser un Delta. Un estúpido y humillante Delta.
A su "padre" se le permitió hablar con los jueces del consejo, llevando a sus más relucientes abogados. Quien pagó la pena más grande fue Ulric a causa de permitir abusos a Omegas, arrebatándole el mandato, siendo sólo gracias a su Omega que no perdió la cordura al no tener manada que liderar. Jackson, por su parte, creyó que el hombre haría algo por él luego de culpar a Ulric en su mayoría.
Claramente no lo hizo. Lo ofreció como un esclavo a otro Alfa que era mucho más maduro, grande y fuerte que él a cambio de una buena cantidad de billetes, concordando entre los miembros del consejo —mismos a los que Jackson consideró corruptos— en que ese sería un buen castigo para un abusador y violador. Sabía que su supuesto padre sólo quería vengarse por haber aplazado sus planes al ser separado de las do