Qué pasó con la mandíbula tensa y con el viento como lo único que la mantenía en pie en la puerta principal de su casa la joven miró como los empleados cargaban sus maletas preparadas por su madre porque ante la intensidad del momento ella no pudo con sus emociones...
Entre ellos estaba esa caja especial donde su vestido de novia ya planchado iba resguardado, las tres camionetas estaban listas para toda la familia mientras los Maswell sentían que iban a unas vacaciones con todo incluido la joven Artemisa solo sentía como el corazón se le apretaba tan fuerte contra sí mismo que parecía autodestruirse.
Sus movimientos habían sido casi involuntarios, describirse como una muñeca podría ser la mejor forma de explicar cómo se había percibido en ese día que ya estaba por acabarse una vez más a tan solo una noche de lo que sería su boda con ese hombre al que no conocía pero para el que se había preparado incluso con una depilación completa y lencería que su propia madre en esos actos anormal