El hombre mayor sabe que la mejor opción para ellos y sus familias es que dejen de existir. De esa forma, los Caligiuri sabrán que no hablaron y no tocarán a su familia, al igual que los Mancini que cumplirán con su palabra. A pesar de eso, el corazón del hombre no puede estar tranquilo y espera que sus amigos puedan ayudar y proteger a su familia, puesto que don Antonio Caligiuri es un hombre tan impredecible y sin valores, que en un arranque de ira podría atacar a su familia.
— Tercera opción — dice el hombre con la voz tensa.
El joven se vuelve a mirarlo y niega con la cabeza, al comprobar que van a ser ejecutados en segundos. Rocco asiente y Salvatore se acerca al hombre y empieza a suministrarle la descarga de ciento veinte voltios. El cuerpo del hombre tiembla, pero el joven comprende que a él no le han hecho nada, le han permitido, elegir.
— Esperen. Don Rocco, por favor, espere. — Salvatore se detiene ante un gesto de Rocco. — Elijo la segunda opción. Es