Dos gemelas son separadas al nacer, la mayor llamada Ilse y la menor Geanna, lo que no saben es que Adán, el padre de las niñas, dio por muerta a Geanna y la vendió por 20 mil dólares a una familia millonaria porque la bebe de estos nació muerta, hicieron un intercambio, años después Ilse comienza a trabajar en un centro comercial, en un local de ropa, famosa por su marca y el destino hace una mala jugada, la abuela de Geanna quien es ahora Neferet se encuentra con Ilse. Frederick es jefe de Ilse y ella tiene miedo de que sea despedida, lo que no sabe es que Frederick está enamorado de ella, pero le oculta algo muy grande, él es agente del FBI, y justo cuando Ilse está delicada de salud lo llaman porque tiene un trabajo capturar a Deniz Polat hermano de Homer Polat, puesto que Deniz escapo de Turquía y ahora tienen una oportunidad, pero no se quedara así, el destino siempre sabe cómo actuar la mano derecha de Deniz conoce a Neferet y trata de meterla en la mafia, pero antes de hacerlo todos son invitados a una fiesta y desde ese momento comienza un verdadero intercambio.
Leer másNecesito hacerlo, necesito hacerlo, así podré salvar a mamá. –se repetía Ilse.
- ¿Qué haces hija? ¿todo bien? –preguntó Lorena su madre.
-Si mama todo bien no te preocupes, ve a descansar, mientras yo preparo la cena. –dijo y su madre asintió con la cabeza, fue a preparar la cena y temía que la llamaran, debía de actuar normal……
23 años atrás.
-Adán, necesito que me lleves al hospital se me rompió la fuente. –dijo una madre desesperada, temiendo dar a luz en aquella casa.
-Mujer si te quejas, m*****a la hora en que saliste embarazada. –exclamó aquel hombre y a regañadientes se levantó de su cama y fue por un taxi.
Ambos llegaron al hospital y atendieron a la mujer que estaba en trabajo de parto, mientras la mujer estaba en el quirófano, aquel hombre esperaba en la sala de espera, se estaba quedando dormido cuando una pareja de ancianos salió llorando de una habitación cercana.
-No puede ser, mi primera nieta y nació muerta, no puedo, necesito hacer algo para que mi hija no sepa sobre la muerte de su bebe. –dijo la mujer, su ropa se veía muy costosa ¿pero que hacia una mujer así de esa talla en un hospital de pobres? Se preguntó aquel hombre, miro hacia la pareja de ancianos ellos se estaban yendo, pero el hombre reacciono a tiempo corrió hacia los ancianos.
-Disculpen yo tengo la solución a sus problemas. –habló en voz baja aquel hombre, a la mujer se le iluminaron sus ojos.
-No te conocemos ¿Qué es lo que quieres? –preguntó el hombre que venía con la mujer.
-Mi esposa acaba de fallecer, no me siento apto para cuidar a mi bebe solo, no sé si podre darle una vida mejor. –dijo aquel hombre, el siempre sabia como mentir y lo hacía a la perfección, comenzó a llorar para hacer creíble la historia, aquellos ancianos se apiadaron de él.
- ¿Puedes dárnosla? –llorando aquella mujer.
-Sí, solo necesito que me de unos días para poder despedirme de ella. –hablo el hombre limpiándose las lágrimas.
-No puedes hacerlo.
-Solo unas horas está bien, usted puede decirle a su hija que su bebe se quedara en observación y después de unas horas podrá verla en la habitación de su hija.
-Está bien, voy a confiar en ti. –dijo la mujer y el hombre asintió, ella saco de su cartera una libreta y una pluma.
-Esta es la habitación de mi hija, te daré 20 mil dólares por tu silencio. –dijo la mujer anciana.
-Descuide, solo le pido que la cuiden y le deán el amor que ella necesita.
-No habrá problemas con eso.
Aquel hombre se llevó la hoja que le había dado la mujer anciana, llego hasta la sala de espera y se acercó a la enfermera.
-Enfermera ¿Cómo está mi esposa?
-Su esposa se desmayó, hicimos lo posible por salvar a ambas bebas. –Dijo la enfermera.
-Necesito que me hagas un favor.
-Lo siento yo no puedo hacer ningún favor.
- ¿Hablamos de 5 mil dólares? –Dijo aquel hombre y la enfermera sonrió.
- ¿Qué favor necesita?
-Que hagas creer a mi mujer que una bebé nació muerta.
-Señor ¿no cree que usted que eso es imposible?
-En la habitación 45 una mujer perdió a su bebé, puede traerla y hacerla pasar como la mía y la mía puede intercambiarla, tenga en cuenta que son 5 mil dólares.
-Está bien, lo hare. –aquel hombre sonrió y la enfermera se fue.
Pasaron horas y Lorena fue llevada a su habitación 46 ¿coincidencia?
-Adán necesito ver a mis bebes.
-Sobre eso quería comentarte algo. –Dijo Adán con lágrimas en los ojos, necesitaba hacer creíble aquella historia.
-¿Qué paso? Me estas asustando habla rápido.
-Una bebe…. Una bebe, nació muerta. –Dijo Adán.
-No, no, no, no, no mi bebe, no es posible, pero yo escuche dos llantos diferentes, por favor dime que es mentira. –Dijo Lorena con lágrimas en los ojos.
-Lo siento, solo tenemos una bebe. –Dijo Adán limpiándose las lágrimas.
-QUIERO VER A MI BEBE, NECESITO VERLA. –Dijo Lorena Gritando.
Como si fuera todo posible la enfermera llego con una bebe y se la dio a Lorena, aquella madre comenzó a llorar con su bebé en brazos.
-Podría por favor traerme a mi otra bebe. –Dijo aquella madre devastada.
-Enseguida la traigo, pero cálmese por favor. –Dijo la enfermera.
Pasaron minutos y la enfermera entrego en la habitación de alado a la otra hija de Lorena.
-Hija aquí está tu bebe, mira que hermosa es. –Dijo aquella anciana
La enfermera salió de la habitación 45 y se dirigió a la 46, Lorena estaba muy mal, por la pérdida de su bebe.
-Señora aquí le traigo a su bebe, cálmese por favor. –Dijo aquella enfermera y salió de la habitación.
-Amor tranquilízate tienes que ser fuerte para nuestra bebe. –Dijo aquel hombre un poco triste pero lo que estaba pensando era totalmente diferente, quería verse con todo ese dinero, le pediría más dinero a la anciana mujer quería dejar la vida de pobre que tenía.
-Tendré que conformarme con una, aunque me hubiera gustado tener ambas. –Dijo Lorena.
-Lo se amor. –Dijo Adán.
Después de dos días le dieron el alta a las dos mujeres, mientras una reía y soñaba en cómo hacer feliz a su hija, la otra madre lloraba por la pérdida de una.
-NO ENTIENDO CÓMO PUDISTE HABER MUERTO, SIEMPRE TE VOY A RECORDAR MI QUERIDA BEBE, AHORA ERES MI ÁNGEL, MI PEQUEÑA GIANNA, ME HUBIERA GUSTADO VERTE CRECER ALADO DE TU HERMANA, TE AMO MUCHO MI BEBE –Decía Lorena con lágrimas en los ojos.
-PORQUE DIOS MÍO ME LA QUITASTE. –Lanzo un grito desgarrador.
–YO SIEMPRE FUI BUENA Y TÚ ME QUITASTE A UNA HIJA, NO SÉ QUÉ HACER. –Volvió a gritar, ese grito desgarrador se escuchó muy fuerte, e hizo asustar su bebe Ilse, su bebe que solo la acompañaría.
–EL DOLOR DE UNA MADRE ES MUY FUERTE, NO TENGO FUERZAS PARA SEGUIR, NO SE COMPARA CON NADA, ME ODIO A MÍ MISMA POR DESMAYARME Y PERDERTE, PERDÓNAME MI AMOR, SOLO ERAS UNA BEBE. –Lorena gritaba y era un grito desgarrador y de desesperación, se iba a culpar siempre pro haber perdido a su otra bebé.
-Lorena tenemos que irnos. –Dijo Adán, el solo quería irse, dejar a su esposa y huir.
Pasaron varias horas y ella salió del cementerio devastada por nada del mundo su pequeña Gianna volvería, solo le quedaba cuidar a su pequeña Ilse, llegaron a casa y el marido solo la miro con desprecio.
-Tengo algo que decirte Lorena. –Dijo aquel hombre, Lorena no entendía que le diría Adán.
Ilse.Adela había lanzado el encendedor y rogaba mentalmente mientras gritaba que me salvaran, mientras Adela salía con, Neferet quién me llamaba, nunca iba a conocer a mi bebé, Frederick perdería a sus dos amores, el fuego se acercaba cada vez, la mano me dolía demasiado, cerré con fuerzas mis ojos, me era imposible salir estaba atada de manos y pies, el calor del fuego se intensificaba, estaba llegando a los tanques llenos de gas, estaba por desmayarme cuando sentí varias manos en mi espalda y piernas.-¿Fred? -fue lo único que pude musitar.Frederick.Minutos antes.Estábamos sobrevolando toda el área, Lorena y los demás iban en camionetas, sabíamos donde se encontraban.Ilse mi amor iré por ti y nuestro bebé.Deje el helicóptero al mando de uno de mi excompañero, me puse mi chaleco antibalas, puse una soga para poder descender y antes de hacerlo, mire al cielo pidiéndole a Dios desde los más profundo que ella y el bebé sobrevivieran.Escuché que alguien le daba instrucciones a otr
En momentos como este muchos llorarían, otros desearían morir de inmediato, pero yo no, así que me comencé a reír escandalosamente, llamando la atención de todos.-Nef…. –—Adela. —Quería que me mirara.Ella lo hizo y me miró de una manera desafiante.-¿De veras quieres todo esto? ¿Las guerras y todo? —No sabes...—No. -la interrumpí. -no sabemos ni mierda, acláralo, ¡ya maldita sea!-Solo una de ustedes debe vivir.¡Para qué! –la reté en decirme la verdad¡CÁLLATE NEFERET!—No, NO, ME VOY A CALLAR, SI VOY A MORIR, MEREZCO SABER EL PORQUÉ-Bien.—Es el acuerdo.¿Acuerdo de qué? –preguntó Ilse.-La mafia, niñas.—¿Mafia? –siguió preguntando Ilse.—Sofía explícales. –Demandó, pero ella solo bufó.-Años atrás, se fundó una organización, con 8 miembros de diferentes países, yo quede como la líder años atrás, esto viene de generación en generación, cuando supe de mis dos hijos tuve que matar a uno, pero no podía, ellos deberían salvarse, así que le entregue mis hijos a diferentes hombres,
ILSEUn sonido provenía de no sé qué lugar, trataba de recordar donde estaba, pero todo llego en flashback, quise abrir mis ojos, pero no podía, me di cuenta de que tenía una venda y no solo eso, también estaba amarrada en una silla, quise hablar, pero sentí una especie de navaja recorriendo mis labios, me quedé completamente helada.-Shhhh, no hables. –me hablaron en un susurro, era Deniz quien me tenía en aquella silla, la navaja comenzó a bajar lentamente hasta mi corazón. –Si hablas te mueres. –Comenzó hacer círculos en mi pecho, trate de moverme un poco.-Bien, arriba. –se escuchó la voz de una mujer.Seguido esto solo hubo silencio hasta que sentí agua en mi cuerpo, me habían tirado agua.-Hijo de p…. –alguien me abofeteo, sentí la piel muy roja.-Oye! –escuche alguien más.Neferet.Sentí una punzada en la mano, intenté gritar, pero no podía debido a la venda que tenía en mi boca, quise abrir mis ojos, pero no podía por otra estúpida venda, no solamente allí, también en las mano
DMITRIY CARTER.-Traigan los mapas y la pantalla del GPS que está vinculado necesitamos ver su localización.-Necesito que llamen a Frederick. –lleve mis manos a la cabeza. –No sé dónde anda metido ahora que lo necesito.-Papá necesitas decirle a Lorena.-Charlotte ahora no.-Papá son sus hijas.-No estoy para decirle ahora, no me siento preparado para decirle.-Lo tienes que hacer papá. –Charlotte me decía con voz calmada mientras yo estaba hecho lio, se habían llevado a las dos, las encontraremos estoy seguro de eso, se nos facilita porque ambas tienen chip de geolocalización y es fácil encontrarlas. Charlotte seguía insistiendo.-Charlotte basta, necesito que te calles por un momento-Su hija quiere ayudar señor. –me dijo la mujer llamada Rebecca.-Tú no te metas.-No le hable así, estamos aquí para ayudar. –comento el hombre estadounidense, mientras yo colocaba el mapa en la mesa que había traído Jean.-Por suerte no pudieron dar con la laptop, estaba muy escondida. –me dijo mient
Se escuchó un sonido de arma, pensé que ya estaba muerta y lo que veía era mi espíritu, sonara totalmente loco, lo creí así, abrí los ojos y vi un hombre, le había disparado cerca de la pierna a Hasan.-Dijo que la quería viva Hasan, hagas locuras sabes cómo se pone. –hablo aquel hombre.-Esta perra es mía, no entiendo cuál es el afán de llevársela. –comento DenizHasan se acercó a mí, llevo sus manos atrás de mi cabeza, me levanto en un jaloneo de cabello, tiro de mi hacia delante y me entrego al hombre que había llegado, pero Deniz se acercó.-Iré contigo, espero que tu jefe me dé buena recompensa por –me tomo del mentón y me miro a los ojos. –Esta preciosura. –me dedico una sonrisa macabra.-Señorita sígame. –aquel hombre no era como Deniz y Hasan, él se veía diferente.Yo lo seguí a la camioneta que estaba atrás de él, esa camioneta no la había visto, era una de color blanco.-Suba por favor.- ¿Te gusto esta perra? –bufo Deniz.-Puedo ser un maleante, pero nunca olvido los modale
-Confirmado señor, no hay armas ni nada, todo se los llevaron. –que me dijera eso, me puso a sudar frío, lleve mis manos a la cabeza.Los nuevos prototipos se los habían llevado, se invirtió mucho dinero en esas armas nuevas, golpeé la mesa que estaba cerca de mí.-BUSQUEN EN TODOS LOS MALDITOS RINCONES DE ESTA CIUDAD! –Lorena sin dudas me mataría por ocultarle la verdad sobre sus hijas.-Le dijiste a Lorena? –pregunto Jean-No le he dicho y tú no le dirás.-Entendido.Me fui a la parte del patio, necesitaba tomar aire, cuando estaba tratando de pensar en cómo arreglar la situación escuche un auto fuera, me quede allí en pocos minutos, sentí alguien detrás de mí.- ¿Dónde está Frederick? Lo necesito aquí. –demande-Eso será imposible papá. –la voz de Charlotte sonaba a mi espalda- ¿Qué quieres decir? –pregunté volteándome, mientras cruzaba los brazos, fruncí el ceño cuando….-Que es imposible porque….- ¿¡DONDE ESTÁ!? –exclame, mientras la miraba y a la vez a los desconocidos que est
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