―Es muy arriesgado. ―Kalen miró a Aiden. ―Debimos salir en cuanto ese hijo de putä nos mostró la foto. ¿Por qué se ha retrasado todo? ¡Matt ya debe estar ahí! ―Aiden jugó frenéticamente con su barba, tiene la mirada fija al frente, pero no ve nada en realidad. Su mente está volando lejos de ahí. ―¡Aiden!
―Lo sé. ―Respondió suspirando. ―Todo saldrá bien, lo sé. ―Miró el reloj de pulsera y su corazón se alteró un poco más. ―No podíamos salir de inmediato, Matt podía hacer algo estúpidø y eso nos costaría el viaje. ―Lamió sus labios. ―Debía dejarlo ganar. ―Endureció el gesto. ―Era la única manera.
―Tienes a alguien vigilándola, ¿Por qué no lo llamaste? ―No comprendía absolutamente nada.
―¿Puedes confiar en mí? ―Kalen pasó saliva, no veía esa mirada desde que eran chavales.
―Bien. ―Se despreocupó. ―Lamento ponerme pesado. ―Se acomodó en su puesto.
Lo que sea que su amigo estuviera haciendo sin duda es una locura, pero también sabe que le dará resultados. Aiden es conocido por ser maquinad