Llegué al jardín del hospital, froté mi rostro con mis manos y decidí llamar a Maryam para informarle de la situación que se había dado.
“¿Qué has dicho?” Maryam se escuchó totalmente agitada. “Dime en qué hospital se encuentran, pienso ir inmediatamente para allá.”
Le dije en dónde nos encontrábamos, luego revisé mi celular en búsqueda de algún mensaje de Rocío, pero no había dicho nada.
—De seguro que es por la diferencia horaria, pero como la extraño y la necesito en estos momentos.
Me había acostumbrado demasiado a la presencia de Rocío y de los niños, quizás si ella estuviera a mi lado en estos momentos, me podía ayudar con lo que estaba sintiendo.
Le escribí un corto mensaje diciéndole que necesitaba hablar con ella cuando estuviera disponible y luego de eso guardé mi celular.
—Kany —miré a Maryam ante mis ojos —. ¿En dónde se encuentra mi hermano?
—¿Qué haces aquí? ¿En tan poco tiempo has venido? No hace mucho que hablé contigo.
—Claro que lo tiene, 20 minutos son más que sufic