Días más tarde.
Elena estaba viviendo su mejor momento, mientras que su vientre crecía sin permiso alguno, Leonardo se encargaba de que la trataran como una reina, había reunido a todo el personal para presentar a Elena como su esposa, la señora de la casa, a quien exigió que todo el personal tendría que rendirle pleitesía.
Las labores de Leonardo se estaban convirtiendo en una pesadilla, los clientes eran difíciles, sus negocios se estaban viendo debilitados debido a la guerra con la familia Fiorentini y el rechazo de su propia familia.
Pero aún así Leonardo batallaba en contra de la corriente mostrando su grandeza, un feroz y enorme pez que devoraba todo a su paso, quienes trataban de darle la espalda él los liquidaba y ponía a personal que se encargara de aquellos negocios.
En muy poco tiempo el bando de Leonardo no era insignificante, él sabía lo que se venía y por ello se estaba preparando para lidiar con la guerra más difícil de toda su vida.
Para su desgracia, sus hazañas y a