Anna en medio de la desesperación tomó el móvil y pidió una ambulancia, a los pocos minutos los paramédicos hicieron presencia en medio de aquel campo de batalla.
Leonardo fue llevado hacia el interior de la ambulancia, Elena sostuvo su mano y lo acompañó.
—Pronto estarán las autoridades en este lugar, debemos irnos Santino —hablo Anna.
—Llevaré el cuerpo de Greta conmigo, su cuerpo merece estar en un lugar donde podré visitarla y llevarle flores.
Santino levantó el cuerpo de Greta y lo llevó a uno de los autos, Anna se sentó al volante y condujo a toda prisa, mientras que Santino y Anna despidieron a Greta, en una sala de urgencias Leonardo se debatía entre la vida y la muerte.
Elena estaba deshecha en la sala de espera, Leonardo había perdido demasiada sangre, y las posibilidades de que pudiera sobrevivir eran muy pocas.
En el interior de aquella sala de reanimación, un sonido agudo hizo presencia en una de las máquinas, los doctores de manera atenta y a tiempo brindaban reanimació