26. Verdad oculta

Un segundo después del cruce de palabras, Alejandro levantó ligeramente la mano. No hizo falta más. Dos de sus hombres, vestidos de traje oscuro, se acercaron por los laterales como sombras entrenadas y sujetaron a Lisseth con fuerza. Ella gritó, forcejeó con desesperación, tratando de zafarse. Su voz se alzó sobre el murmullo de la sala, sobre las exclamaciones ahogadas de los presentes.

—¡Suéltenme! ¡No tienen derecho! ¡Alejandro!

Pero él no parpadeó. No dijo una sola palabra. Solo la miraba, con los ojos fríos como el acero, como si todo lo que acababa de ocurrir no fuera más que un mal chiste que necesitaba corregir… de inmediato.

Fue entonces cuando Danrrique se interpuso. Caminó hasta colocarse entre los hombres y Lisseth, su expresión tensa, desafiante.

—Basta, Alejandro. Esto no es el siglo pasado. No puedes llevártela como si fuera tu propiedad.

Pero Alejandro lo miró con una calma oscura, su voz fue baja, pero afilada como una navaja.

—No te entrometas en asuntos que solo co
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App