Capítulo 423

—¿Estabas soñando? —pregunta mordisqueándome el dedo meñique del pie.

—Contigo —suspiro—. Avísame cuando vayamos a despegar para que meta la cabeza entre las piernas.

—Yo meteré la cabeza entre tus piernas. —Me chupa el dedo y me estremezco.

—Tú avísame.

—Mira por la ventana, nena.

Frunzo el ceño y me asomo esperando ver pistas y aviones, pero sólo veo nubes.

—¡Anda!

Por un segundo me entra el pánico, pero entonces me doy cuenta de que no registro ningún movimiento. Apenas se oye ningún ruido tampoco. Todo está tranquilo. Miro al otro lado y veo nuestros vasos de agua colocados sobre una mesa reluciente.

Entonces me asomo por el pasillo y veo a la mujer perfecta ocupándose de sus cosas al otro extremo del jet.

—¿Por qué no me has avisado? —pregunto acomodándome de nuevo en mi asiento.

Me besa el dedo.

—¿Y perderme los sonidos y las caras que estabas poniendo? —Me suelta el pie—. Ven aquí.

No vacilo ni por un segundo. Me desabrocho el cinturón y prácticamente me abalanzo sobre su regaz
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP