En el Capítulo Ochenta y Siete, la victoria de Veridia es agridulce. Christina demuestra ser una líder capaz, pero su pueblo, al verla en un momento de intimidad con Wolf, toma una decisión que lo cambia todo. La desconfianza ancestral se impone sobre la gratitud, y los ancianos exigen que Christina se case con Rhodri, un hombre de su propia gente. Ahora, la princesa se enfrenta a una encrucijada imposible: elegir entre el deber hacia su pueblo y el amor que siente por el hombre que la salvó. La guerra ya no es solo contra un enemigo externo, sino también contra las tradiciones y el destino que otros han elegido para ella. ¿Qué camino tomará? Si te ha gustado esta historia, te invito a agregarla a tu biblioteca para no perderte los próximos capítulos. Y si deseas seguir mis creaciones, puedes hacerte mi seguidor.