CAPITULO 37

VALERIA

Dolor. Eso era lo único que podía sentir. Cada fibra de mi cuerpo ardía como si hubiera sido partida en mil pedazos. No podía moverme. Novikov me había dado la golpiza de mi vida... una que casi me mata.

Estaba tirada en el suelo, inmóvil, mientras lo observaba desde mi rincón. Se ahogaba en alcohol, tambaleándose hasta caer desplomado en el sofá, completamente borracho. Sobre la mesa, vi su teléfono. Con el poco aliento que me quedaba, me arrastré hacia él, sollozando cuando un dolor punzante se extendió por mis costillas. Apenas pude contener un grito.

Con manos temblorosas marqué el número de Alessandro, rezando para que contestara.

—¿Hola? —escuché su voz y rompí en lágrimas—. Gracias, Dios...

—Alessandro... —mi voz era apenas un susurro entrecortado.

—¡Cariño! ¿Dónde estás?

—En una finca... a las afueras de Rusia. Se llama Finca La Margarita... —respirar me costaba cada vez más—. Ven por mí... no lo aguanto más...

—Tranquila, pronto estaremos juntos.

Vi a Novikov moverse.
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP