CAPITULO 14

Al fin lograba sentir un poco de libertad al estar caminando por las calles de Milán. Lo único malo era que teníamos dos hombres siguiéndonos a todos lados.

—Odio tener a estos dos detrás de nosotras —Antonina mira hacia atrás y le guiña el ojo a uno de ellos.

—¡Antonina! —Este se ríe—. Eres una coqueta.

—Amiga, solo disfruto de la vista. Mejor concentrémonos y vamos a gastar dinero a lo que dé.

Tienda por tienda empezamos a ser asqueadas, Antonina y yo. Creo que la tarjeta ya empezó a calentarse de tanto pasarla por el datáfono.

Nuestras manos tenían tantas bolsas que los hombres de Alessandro también terminaron cargando algunas.

—Bueno, amiga, creo que llegó el momento de elegir tu vestido —la parte que no quería.

Entramos a la tienda más reconocida de novias en todo Milán, y también en muchas partes del mundo. Al entrar, nos recibieron con una copa de vino blanco y una asesora se nos acercó.

—Buenas tardes. Soy Erika, ¿cómo las puedo ayudar?

—Hola, Erika. Estoy buscando un vestido
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App