Jenn:
No pensaba volver a encontrarme con el señor Kang de nuevo. Todavía no me acostumbraba a su presencia ni a su fuerte aura, por que si, el hombre emana un aura pesada y un tanto oscura. De seguro que debe ser del tipo de hombre que es perfeccionista y un tanto dominante.
No lo se.
Comer con el en este lujoso restaurante me resulta un poco abrumador y un tanto incomodó.
—¿No le gusta la comida?
—No es eso, es que jamas habia venido a este lugar tan lujoso, me siento fuera de lugar y más vestida asi.
Mi vestimenta no estaba mal, solo unos Jeans azules, camisa blanca con una de cuadros encima de esta. El tenia un traje costoso, por que si es costoso, usar Hugo Boss en tono negro que se ajusta a su enorme figura, es un lujo, bueno ¿que puedo decir? El es millonario.
—Luce muy bien, no piense que se ve mal, las personas están metidas en sus propios asuntos. —rió un poco mientras cortaba su carne.
Efectivamente así era, las personas no estaban al pendiente de mi o lo que usaba, todos estaban en sus propios mundos, aun asi, no podia evitar sentirme un poco incomoda, quizá no eran las personas, si no el, el señor Kang.
Es imposible no sentirme nerviosa con semejante hombre tan enorme.
Aún no se por que le acepte la comida, estoy loca.
—Y dígame señorita Foster, ¿Es de New York?
—Por favor llameme Jenn, detesto las formalidades y respondiendo su pregunta no, no soy de aqui, vengo de Houston.
—Oh, es de Texas —hubo sorpresa en su voz—, es un estado precioso.
—¿Lo conoce?
—He ido un par de veces por negocios... Su trabajo ¿le gusta?
¿Por que anda tan curioso sobre mi vida?
¿Le respondo con la verdad? ¿O le miento descaradamente?
—Si, el periodismo es lo que más me gusta hacer, también un poco de fotografía.
—Me doy cuenta, las fotos que me hizo fueron de mis favoritas.
—Señor Kang, deje de hablarme de usted, me siento incomoda —rei un poco.
—Lo lamento, no suelo hacer esas cosas, siempre soy demasiado formal como podrá ver hare un esfuerzo Jenn.
Vaya...
Que me llame por mi nombre fue algo difícil de explicar, es tonto pero no se como describirlo. Mejor como o me atorare pensando en tonterias.
—Le.. —rió al verme arrugar la nariz por que no me había tuteado— perdón, te agradezco por aceptar almorzar conmigo, además de que luces menos pálida.
—Oh eso, no hay de que.. No puedo pasarme las comidas por nada del mundo, mi cuerpo no lo resiste, me ha salvado la vida.
—No deberías hacerlo, podrías colapsar —su tono de voz fue un poco más serio—. La salud es importante.
—Tomare en cuenta su consejo... —le di un trago a mi jugo— ¿Por que me invitó a comer?
—Por agradecimiento, las fotos en serio me encantaron, la segunda es que lucía algo pálida y la tercera es que me atraes mucho y quise conocerte un poco más.
Casi me ahogo con la comida al escucharlo. Eso fue bastante directo.
—No lo dice en serio.
—Hablo en serio... —me dio una sonrisa leve—, soy un hombre bastante directo y hablo en serio cuando le digo que me atraes, claro, soy de los que se toma su tiempo para todo, incluso conocer a las personas que me rodean y puede que formen parte de mi vida.
Lo dijo con tanta simplicidad que me resulta bastante abrumador, es la primera vez en mi vida que alguien me dice algo como eso.
Jamás me he enamorado, o bueno si lo hice pero fue en mi adolescencia y no funciono, no por el, si no por mi por que me asusta el compromiso, amo mi libertad y eso de estar atada a alguien me causa pavor.
Puede que suene mal o un poco egoista de mi parte, pero así es como me siento. Para mi, mi carrera es mas importante que cualquier cosa y es algo de lo que me he planteado desde siempre.
—Lo siento señor Kang, pero ahora no me interesa salir con alguien, mi enfoque esta en mi carrera, solo en eso.
—No lo sientas, me gusta que sean honestos conmigo y lo aprecio... —inclinó su cabeza hacia adelante en forma de reverencia—. Pero debe saber que soy un hombre que no se rinde fácilmente, no diré que siempre consigo lo que quiero, pero se esforzarme en conseguirlo y usted es alguien que ha llamado por completo mi atención y dejarla ir no sera tan sencillo.
No lo se pero siento que este hombre es de lo que hablan muy en serio. Yo simplemente no deseo una relacion ahora. Aunque pensandolo bien podria tener algo casual ¿no?
No Jenn, saca esas ideas de tu mente.
—Si te vere mas seguido que espero que así sea, por favor quiero que me tutees, me sentiria mas comodo.
—Esta bien.
Seguí almorzando con el, hablamos sobre cosas no tan personales, jamas me habia sentado a hablar con una persona como el, hasta tonta me siento por que se nota que es muy inteligente y siempre tiene un tema con el que hablar. Me di cuenta de que no es muy expresivo, es directo y bastante perfeccionista, con solo mirar la forma en que come, se sienta y actúa, se puede notar.
Y lo apuesto, porque si es bastante apuesto. Hasta donde se los Coreanos suelen cuidarse mucho y se preocupan por su apariencia, desde mi silla podía ver que la piel de Dak Ho es tersa y limpia, para ser un hombre de treinta y dos años, se ve demasiado joven.
—Tuve que irme de aquí para regresar a Corea y cumplir con el servicio militar, regrese hace unos meses, fue una tortura estar alla.
—¿Lo dice en serio? —asintió—. No puede ser tan malo.
—Lo es créeme, dentro de ese lugar se olvidan si eres famoso, tienes dinero o algo por el estilo. Eres alguien comun, es como todo los servicios militares, te tratan como basura para hacerte mas fuerte, al menos a mi me sirvió para mantenerme en paz y demostrar mis habilidades.
—¿Y en que es bueno? A parte de los números y finanzas.
—Soy bueno usando armas, fui uno de los mejores de mi rango, también se artes marciales y usar la espada. Mi padre me metia a todo tipo de actividades cuando niño para tener en que ocuparme —sonrió. Entre todo eso, también estudiar y heme aquí, siendo el empresario que mi familia espera.
—Vaya.
Estaba realmente fascinada al escucharlo, es un hombre bastante preparado, ahora veo por que es tan enorme si es bueno en algunos deportes y otras cosas.
(...)
Despues de almorzar con el, regrese a mi mundo, el trabajo.
Justo en una hora debía ir a una escena del crimen a tomar algunas notas para el periódico, tome mis cosas y fui hasta la escena del crimen que era en Manhattan, no estaba tan lejos del periodico asi que seria rapido.
Mi mente se fue hacia esa grabación, no pude destruirla, solo por la rabia que tenia hacia Hanna por dejarme ir a ese lugar. La escondí en mi departamento y cuando tenga la oportunidad de usarla, lo haré.
Debo estar loca para hacer algo como eso.
Llegue a la escena del crimen, los policías estaban impidiendo el paso a los periodistas que llegaban a la escena. Un jadeo salió de mi boca al ver el cuerpo de la victima, estaba cubierto con dos sábanas ya que estaba partido a la mitad.
¿Quien haria algo como eso?
—Jenn.
—Thomas.
—¿Como estas? —se acercó a mi— estas hermosa.
—Gracias, vine a tomar algunas notas y fotos.
Thomas es el detective de la policía de New York, es el ser más prepotente y ególatra que conozco, me acosté con el una vez, la peor experiencia de mi vida, el tamaño no compensa su eyaculacion precoz. Lo peor es que lo escuché alardear sobre acostarse conmigo, desde entonces jamás lo he vuelto a ver hasta ahora.
Luego de eso seguía insistiendo a querer salir conmigo pero me he negado, no pienso cometer el error dos veces.
—Tengo una víctima de desmembramiento —saque mi libreta y empecé a anotar, también encendí mi grabadora por si me perdía algún detalle—. Aun no se ha identificado ya que no tenía nada en sus bolsillos, fue dejado en el callejón a eso de las cinco de la mañana, todo apunta a que fueron los Yakuza.
—¿Los Yakuza? ¿Por qué lo dices?
—No puedo darte mas detalles hermosa, aunque si puedes recibirme un cafe.
—Lo siento pero tengo trabajo que hacer —corte la grabación, guarde mis cosas y le sonreí—, quizá en otro momento.
—Vamos Jenn, hace meses que no nos vemos, tampoco tomamos algo, por favor.
—Lo siento —me encogí de hombros y me dispuse a salir del lugar, ya mi trabajo estaba hecho.
No me gusta ser grosera con nadie, pero cuando me presionan a algo, suelo ser asi, odio que me obligan e insistan con las cosas, eso no es lo mio.
Se que debí frenarlo al instante, pero tenía curiosidad por saber como era en la cama, hasta que me lleve una fea decepción, pero bueno, asi es la vida, injusta con los justos.
Soy una persona libre, no nací para estar atada a nadie.
Aunque a veces me contradigo a mi misma muchas veces, digo que no puedo estar atada a nadie y lo estoy con mi empleo. Tonto empleo con bonos insignificantes, horario de m****a y exigencias, Dios, como deseo largarme de ese lugar lo más pronto posible.
Ya estoy pensando en nuevas opciones, voy a arriesgarme a enviar algunas solicitudes, pero no se si seria buena idea, ya que no tengo experiencia o pruebas de que haya trabajado en algún periódico o algo parecido, por que mi trabajo se lo acredita Hanna.
Joder.
Una cosa es peor que la otra definitivamente.
(...)
Al dia siguiente...
Llegue temprano que para mi es un récord, al periódico, pero todo el mundo estaba haciendo revuelos en el piso de mi área. Todos andaban de un lado a otro, personas haciendo medidas yendo de aqui para alla.
—Hola Mia ¿me explicas que pasa?
—Nos llegó el rumor que el señor Moore ya no es el dueño del periódico —abrí los ojos sorprendida, ella estaba del mismo modo que yo—. El señor Moore está en quiebra —murmuró— y pues alguien compró las acciones del periódico y el nuevo dueño mandó a remodelar todo.
—No lo puedo creer Mia, es increible lo que me dices.
—Así es, escuche que muchas cosas cambiaran, hoy mismo el dueño se presenta ante nosotros.
No sabía si ese cambio seria bueno o malo, lo que esperaba es que yo no quería salir despedida de aquí, tengo que pensar que es lo que hare.
—Todos a la sala de reuniones, el señor Moore hará un anuncio.
Mire a Mia, ella se encogió de hombros, así que fuimos hasta la sala de reuniones, mi miedo empezó a entrar a mi cuerpo, creo que seré despedida, por que si hay nuevo dueño, eso quiere decir que habrá despido si por que si.
Todos nos sentamos, algunos se quedaron de pie nerviosos y yo, estaba que me comía las uñas.
Vi llegar a algunos ejecutivos, algunos los conocia, otros no. Pero mi atención se fue hacia el par de hombres al final de la fila.
¿Que hacen aqui?
—¿Señor Kang? ¿Ryosuke? —susurré, estaba confundida.
—¿Lo conoces? Digo, al hombre que está al lado del señor Kang.
—Si, nos topamos en el restaurante japonés en el que cenamos ¿lo recuerdas? —la mire y ella asintió—, el me ayudo con un billete que perdí...—volví a mirarlo— no se qué hace aquí, tampoco se que hace aquí el señor Kang.
Se que he visto a Ryosuke dos veces, pero verlo en traje y sin corbata es extraño, debo admitir que me gusta mas ese estilo.
¿Qué sucede contigo Jenn?
Primero fantaseo con el señor Kang, ahora con Ryosuke, no, no puedo hacer eso.
Mi ceño se frunce al ver a señor Kang decirle algo al oído a Ryosuke, joder ¿se conocen? luego ambos miraron a mi dirección, yo me paralice por un momento al sentir la mirada de los dos sobre mi.
Demonios..
—Buenos días a todos —mi vista se fue hacia el señor Moore—. Como han escuchado los rumores, el Daily Notes, tiene un nuevo dueño —los murmullos no se hicieron esperar—, seguiré a cargo como su jefe, pero el periódico, le pertenece a otra persona. Al señor Kang Dak Ho.
Y cuando pensé que esto no estaría peor.
El señor Kang se acomodó el saco y caminó de forma imponente hacia el podio, en sus manos llevaba una carpeta, yo aun no salia de mi impresión al saber que el es el nuevo dueño del periódico.
—Buenos días a todos —empezó con voz firme y ronca—, como escucharon al señor Moore, yo soy ahora el dueño y gran mayoritario del Daily Notes junto con mi socio —señalo hacia su derecha— Ryosuke Tanaka.
No, esto es mucho peor.
—Solo haré pocos anuncios, como pudieron ver, se harán algunas remodelaciones ya que el lugar de trabajo de algunos de ustedes era realmente deplorable, se hará un aumento de sueldo a cada empleado junto con beneficios —volvió a mirar el papel—. Cambios en el personal y mucha más producción... A continuación nombraré a los jefes de redacción, Mia Wilson, se quedara en su puesto, Brandon Aster quedara en su puesto, Collin Bell a area de entretenimiento.
Y así empezó a decir los nombres de los verdaderos redactores, las personas que están detrás de cada escrito y a los que otras personas se les fue otorgado el creído. Honestamente se lo merecen, por que ellos son quienes mas han trabajado.
—Por ultimo Jenn Foster, sera la jefa de redacción de Crímenes, tendencias, farándula.
No puede ser..
Me están dando el puesto de mi jefe, no, no puede ser cierto.
—Los demas seguiran en sus puestos, quiero que sepan que no soy como el señor Moore —miró a todos—. Yo no soy tan flexible, soy una persona imparcial y me gusta las cosas bien hechas, confío en mi criterio y el trabajo de los nuevos jefes, estoy seguro de que este periódico, sera un éxito.
Todos aplaudieron de pie, yo aun me quede sentada asimilando todo lo que acaban de escuchar mis oídos, no puede ser posible esto.
Rápidamente me puse de pie y salí del lugar, sentí que me estaba sofocando ahí dentro. No puede ser, esto tiene que ser un sueño, eso es, estoy soñando.
—¡Jenn! —escuche la voz de Ryosuke el venia hacia a mi, detras de el señor Kang.
Tengo que correr.
Vamos Jenn ¡Corre!
—¿Estas bien? Estás pálida.
Tenía a ambos hombres frente a mi, yo no sabia que hacer, que decir, que pensar. ¿Debía alegrarme? No lo se, todo ha pasado tan rápido.
Joder..