Bruno Delacroix
La foto fue rápida, y Victoria no estuvo presente, había desaparecido de el ambiente.
Eché un vistazo rápido al móvil encendiéndolo el cual apagué por precaución, sabía que no me iban a rastrear pero lo preferí así. En automático el móvil se sacudió dejando entrar un cúmulo de mensajes y llamadas perdidas. Eché una ojeada rápida, viendo que algunas eran importantes y otras las podría resolver más tarde. Thor me había llamado y Frédéric también.
Me acerqué a despedirme diciendo que me tenía que ir. Tardé más tiempo despidiéndome de mi hija, ella me pidió que le comprara una máquina de algodón de azúcar, yo le prometí que sí, finalmente tuve que obligar a mi madre y a Ivette a soltar a Cindy. Casi me suplicó para que la volviera a visitar pronto y que trajera a Cindy, fue un requisito.
Mis hombres también se movieron rápido. Le di órdenes claras a los quince guardaespaldas de mi hija antes de marcharme.
Los movimientos restantes fueron prácticamente mecánicos, hast