Valeria respiro profundo, se puso su bata de seguridad y sus botas.
Se sentó en el mesón de trabajo y dirigió la vista hacia Camila, que aún no había notado su presencia
—Cami— La llamó atrayendo su atención. —Necesitamos empezar la planificación del diseño —dijo en cuanto la joven volteó—. Trae las muestras que están en aquel locker, vamos a hacer los primeros bocetos esta tarde.
Camila asintió de inmediato, obedeciendo a Valeria.
Noah dejó escapar una risa breve sin apartar la vista del trabajo que tenía entre manos. El sonido metálico de las herramientas se mezclaba con el golpeteo de su martillo. Valeria lo observó un instante: tenía fuerza y agilidad, sus movimientos eran precisos… pero no eran de alguien acostumbrado a ese tipo de labor. Sabía manejar las herramientas, sí, pero con la cautela de quien aprendió rápido para no quedar en ridículo.
Él levanto la mirada por un segundo encontrando la de ella. Valeria rodó los ojos de inmediato y él sonrió de nuevo.
La tarde transcurri