Alfa Blaze
Puedo señalar el momento exacto en que mi mundo se vino abajo: fue durante la fiesta del cumpleaños número dieciocho de Dorian, el hijo del Alfa… y mi novio.
Ese fue el día en que encontró a su compañera.
Ese fue el día en que me dejó, sin mirar atrás, como si todas nuestras promesas no hubieran significado nada.
Y ese también fue el día en que descubrí cuán sola podía estar. Los que se hacían llamar mis amigos se volvieron contra mí, y sus burlas me persiguieron hasta que no me quedó más opción que huir… lejos, hasta la casa de mi abuela.
Pero no regresé siendo la misma.
Un año después, volví por una sola razón: mi madre estaba gravemente herida. Solo que esta vez, ya no era la chica rota que se fue. Me entrené, me gradué, y me juré a mí misma que nunca más volvería a depender de un hombre. Jamás permitiría que me menospreciaran otra vez.
Lo que no esperaba al volver era encontrar que el viejo Alfa había muerto… que Dorian había huido cobardemente con su nueva compañera…
Y que en su lugar ahora reinaba Alfa Blaze.
No quería saber nada con alfas. Ni con manadas. Ni con vínculos rotos.
Pero el destino tiene una forma cruel de burlarse de una loba decidida.
Y yo, magneto de problemas, terminé envuelta en la órbita del hombre más poderoso —y peligroso— que he conocido.