C18: Falsos recuerdos.
Annika despertó de golpe, como si una pesadilla la hubiera arrancado de los brazos del sueño. Abrió los ojos de par en par y aspiró con violencia, el aire le llenó los pulmones de un modo áspero, como si hubiese olvidado cómo respirar. Su corazón palpitaba con una intensidad desmesurada, convirtiéndose en un martilleo frenético que le hacía temblar el pecho y las manos. Sentía un nudo de ansiedad que no lograba comprender, era un desasosiego sin forma ni causa, una inquietud que parecía venir desde lo más profundo de su cuerpo.
Estaba acostada en la cama, envuelta entre las sábanas revueltas y húmedas de sudor. Parpadeó varias veces, intentando orientarse, tratando de reconocer el lugar en el que se encontraba, aunque sabía que era su habitación. Todo, sin embargo, le resultaba distinto, como si algo se hubiera desplazado en el tiempo. Tenía la sensación de haber dormido durante días, quizás semanas. Giró lentamente la cabeza hacia su lado derecho, buscando instintivamente una presenc