87. POR TI
[FRANCESCO]
24 de noviembre
Gran Premio de Catar – Noche de carrera
El rugido de los motores es tan fuerte que casi puedo sentirlo retumbar dentro del pecho. Las luces del circuito de Lusail iluminan la pista como si fuera un escenario, y yo estoy justo en el centro, esperando el momento exacto para actuar.
Pole position otra vez. Pero esta vez, se siente distinto.
Cuando el semáforo se enciende en rojo, sólo puedo pensar en una cosa: ella.
Sofía, en el pit wall, concentrada en las pantallas, el auricular apoyado en la mejilla, los labios apretados. La imagino mordiéndose el labio cuando la tensión crece, la misma forma en la que lo hace cuando intenta no perder el control conmigo.
Las luces se apagan.
Acelerador a fondo.
Todo desaparece.
Los primeros giros son una danza peligrosa entre la velocidad y el miedo. Detrás de mí, el rugido del motor de mi rival vibra en los espejos, buscando cualquier error. Pero no pienso darle espacio. No esta noche.
No después de lo que ha significado l