43

Bianca frunció los labios.—¿Así que quieres usarme y luego desecharme? Pues qué pena, he cambiado de opinión, ya no pienso irme.

Esto encajaba perfectamente con el carácter de la señorita Bianca. Alessia arqueó una ceja y miró de reojo a Riley.

La expresión serena de Riley se congeló un instante; en sus ojos, tan tranquilos como un lago, asomó un destello de cambio, pero enseguida recuperó la compostura. Su voz siguió siendo suave:—Mientras no retrases tu tiempo.

Hay personas que parecen gentiles en la superficie, y otras que lo son de corazón.

Alessia sentía que Riley pertenecía al segundo grupo; tal vez su gentileza no era más que un escudo protector.

A muy pocos se les permitía entrar en el corazón de alguien así; pero una vez que lo lograban, esa persona se entregaba por completo.

Del mismo modo, algunos pueden parecer caprichosos y voluntariosos; quizá ésa también sea su coraza.

—En realidad eres muy aburrido. ¿Quién querría quedarse aquí de todos modos?

Bianca lo miró con desdén
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP