96.
AURORA
Me sumerjo entre estantes llenos de libros, pasando mis dedos por cada lomo cubierto de una fina capa de polvo.
Ahí, entre palabras olvidadas, historias antiguas, el olor a cuero desgastados y un toque de humedad, estaba lo que tanto deseaba encontrar.
No sabía cómo lo haría, si el tiempo sería suficiente. Alzo la mirada a los estantes altos, siendo iluminados por las ventanas altas que dejan pasar la luz natural.
Me preguntaba si mi respuesta estaba en esos libros cubiertos de telarañas, tan altos e inalcanzables que parecían haberlos dejado ahí para ser olvidados.
Sigo caminando leyendo lo poco que entiendo de milenios de historia, política, leyes absurdas y demas.
Nada era lo que me importaba, lo que necesitaba.
Crucé a otro asillo con estantes a cada lado, estos narran la historia de la creación, de como fue que llegamos a ser uno con un alma tan hermosa y destructiva a la vez.
Tomé uno de los libros mirando en él, un lobo aullando bajo la luna llena, cuando