Una mano pervertida sube por el muslo derecho de la chica metiéndose sin permiso por debajo de la imitación de short hasta llegar a la nalga y apretarla su gusto provocando que un gemido se escape de la boca de la joven, el cual es ahogado por estar explorando la boca del morocho. Con ambas manos, Gaby la toma del culo y tomándola desprevenida la alza obligándola a enredar las largas piernas en su cintura. Sin dejar de besarla la lleva contra la pared más cercana arrinconándola contra ésta y con una ágil mano le quita la camiseta por la cabeza, dejando al descubierto que no usaba sostén, por lo que sin dudarlo se lleva un rosado pezón a la boca para succionarlo con fuerza. Las caderas de Noe comienzan a moverse descaradamente contra la pelvis del morocho haciendo que ambos estén cada vez más perdidos y excitados. A un paso de llegar a la lujuria. Necesitando más piel, Noe le quita la camiseta a Gaby y raspa con sus dientes el pecho masculino haciéndolo jadear. El morocho se hace de un