Encontrarla.
BORIS
La declaración no cambió nada para mí. No en el fondo.
Nikita Petrova, traidora. Expulsada. Recompensa por su cabeza. El comunicado llevaba el sello de nuestro Vodir. Palabras frías. Cortantes. Sentencias absolutas.
Pero yo no lo creí.
No podía.
Había visto su cuerpo lleno de cicatrices, su voz temblar de rabia, sus ojos vacíos después de cada misión. Nikita no era una traidora. Si había terminado con Lev, si estaba viva… era porque alguien la había forzado a ello. Manipulada. Drogada. Usada. Porque si hubiera querido traicionar, todos estaríamos muertos. Y ella aún sonreiría.
Ahora todos la buscan. Como perros. Como hienas hambrientas. Yo también. Solo que no por la misma razón.
Yo la encontraré antes. Para protegerla.
Mientras otros despliegan escuadrones, yo muevo mis piezas. Silenciosas. Eficientes. Algunos ni saben para quién trabajan. El círculo es pequeño. Nadie de la organización. No quiero ojos de Dmitri sobre esto. Solo míos. Solo de quienes me deben más que la vida.
Es