POV: Helena
El mensaje sin remitente conocido me golpeó con la fuerza de una onda de choque. Cinco palabras, firmadas por "Tu Marido", y el mundo se volteó.
“...subestimaste la avaricia de Serov. Él no va por el Esmeralda. Va por algo que es más fácil de robar que un niño.
Revisa el plano que dejaste en la biblioteca.”
Mi mente, que apenas había encontrado consuelo en el clic del cerrojo de acero, se disparó. Franco no estaba muerto. Sabía que había sobrevivido a su propia farsa. Pero su advertencia era clara: Serov no estaba jugando a lo que él creía. Y lo que es peor, la clave estaba en algo que yo misma había diseñado o dejado al descubierto.
—¿Mami? ¿Ya podemos salir? —La suave voz de Elisa rompió el silencio hermético.
Me arrodillé junto a ella en el pasillo oscuro. La luz de emergencia que le había dado a Sofía proyectaba sombras largas y deformadas en las paredes de acero. Elisa me miraba, con esos ojos esmeralda llenos de inocencia y confusión.
—Aún no, mi amor. Escondámonos u