Capítulo 72 La marca de media luna junto al pulgar.
Raina bajó las escaleras y vio a Román sentado en el sofá de manera muy pulcra, con un traje gris oscuro y una camisa azul claro. Su postura era completamente diferente a la de Iván, que siempre parecía algo relajado.
Aunque venían de los mismos padres, eran muy distintos, y los genes les dieron dos personalidades totalmente opuestas.
Román fue a buscarla, algo que Raina no esperaba.
—Román —dijo ella.
—Raina, ¿te interrumpí? —Él se levantó y fue muy cortés.
—No, Román, por favor, siéntate —respondió Raina, metiéndose en su papel de recibir a la visita.
Román se sentó y le acercó una bolsa que había sobre la mesa.
—Te traje unos pasteles típicos de aquí, pruébalos.
Este hombre no solo era un caballero, sino también era muy atento. Raina mejoró su buena impresión de él.
—¡Gracias!
—Hace rato escuché a la empleada decir que Iván salió. Te pido disculpas por no haberlo contactado antes —explicó Román, aclarando que no era su intención ir cuando Iván no estaba.
Raina también se enteró de q