Capítulo 49. Parte 6
Antonella:
Cada maleta está en la habitación correspondiente, las cajas en la cocina con los utensilios, y en los baños también. Me entusiasma la idea de empezar a ordenar y guardar la ropa en los armarios, porque sé que es real lo que estamos viviendo, porque sé que será mi hogar definitivo, para toda la vida junto a Diego y Marcus, y —por qué no pensarlo— tal vez junto a un mini Diego o una mini Antonella. Instintivamente me toco el vientre, y unos pequeños nervios me atraviesan. Con lo sucedido con Marcus hemos dejado de lado el examen para saber si estoy embarazada, aunque no debería entusiasmarme, pues estoy en un constante estrés y mi regla siempre ha sido irregular.
—¿Tu gatito, Marcus? —pregunto de pronto, recordando que ese animalito lo recogimos en la casa de la playa.
—Está en casa de la hermana de Roberta. A mi... a ella no le gustaba, entonces preferimos dejarlo allá —responde con tristeza, y me reprendo mentalmente, porque nunca fue mi intención recordarle a Ambra, y sin