Pasó un rato desde la llegada al club. Amatista logró que los bebés se durmieran, y ahora sus respiraciones suaves llenaban el silencio de la sala. Los sillones alrededor estaban ocupados por Alan, Joel, Facundo, Andrés, Rita, Isis y algunas mujeres y hombres que trabajaban en el bar. La atmósfera era tensa, y aunque nadie hablaba, las miradas estaban fijas en la mujer que, finalmente, habían conocido como la "famosa Gatita" de Enzo.
Alan rompió el silencio, inclinándose hacia Facundo con una sonrisa maliciosa.
—Bueno, ahora entiendo por qué Enzo está obsesionado con ella. Esos ojos valen cualquier riesgo.
Joel soltó una carcajada contenida. —¿Y lo que hizo? Desafió a Diego y salió viva. Tiene más agallas que algunos aquí.
—Más que Rita, eso seguro —interrumpió Facundo con burla, mirando de reojo a Rita, que se tensó en su asiento.
—Enzo definitivamente perdió quedándose contigo —añadió Andrés, fingiendo compasión hacia Rita. —Aunque supongo que alguien tenía que llenar el espacio vac