Capítulo 55 Tengo todo bajo control

Se acercó a la mesa y, sin pedir permiso, se sentó frente a mí. Me estudió como si yo fuera una pieza clave en su ajedrez.

—Estás hermosa —dijo con tono bajo.

Levanté la taza de té, lo miré por encima del borde y sonreí con sutileza.

—Gracias, Julián. Pero vamos, no estás aquí para halagarme. Ve al grano de una vez. ¿Cuál es tu propuesta?

Él apoyó los codos sobre la mesa, entrelazó las manos y me miró directo a los ojos. Sabía que lo que venía no me iba a gustar. Sentí la tensión antes de que hablara.

—Hoy Rebeca llevará a sus hijos a conocer a su padre.

La taza tembló apenas en mi mano. Me mantuve firme. Parpadeé lentamente, como si lo que acababa de decir no me hubiera estremecido por dentro como un baldado de agua helada. No podía ser. No debía ser.

—Eso no puede ser posible —murmuré, más para mí que para él.

Subí lentamente la mirada, encontrándome con la suya. Firme. Dificultad de hecho.

—Y tú ¿qué ganas contándome todo esto? —pregunté con frialdad, sin quitar la sonrisa que ya e
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP