Mundo de ficçãoIniciar sessãoALONSO:
Al emerger de la cueva, me encontré de frente con mi sobrino Filipo. Su rostro mostraba preocupación y diría yo un poco de desconcierto, al verme vino a mi encuentro.—Hemos encontrado un pasadizo —me informó rápidamente—. Sacamos a todos los prisioneros que estaban atrapados. Dicen que hace muchos años que ya no se encuentran rubíes, pero como las Janare no podían realizar la ceremonia, la piedra no se movía y les era imposible acceder a su riqueza sin destruirla. Por eso estaban tan desesperadas por realizar la ceremonia para ver si funcionaba y se abría con tu Celia. Sentí que mi corazón se aceleraba al comprender las implicaciones de lo que Filipo me estaba contando. Todo empezaba a tener sentido de una manera terrible.—¿Iban a realizar la ceremonia con Celia para ver si se abría de verdad? —pregunté, sint






