Mientras que Leonardo sostenía en sus brazos a su pequeño hijo, Marcello recibía noticias, Leonardo trataba de mantener la calma, pero en su interior estaba desesperado, necesitaba encontrar a su esposa y a su pequeña hija.

—¿Estás seguro?, si estás mintiendo juro que acabaré con toda tu familia y luego acabaré contigo —Marcello presionó al informante.

Marcello terminó la llamada de inmediato se acercó a Leonardo, pasó saliva tomando valor para hablar con su jefe, y más luego de todo lo que estaba sucediendo.

—Señor, está equivocado —habló Marcello logrando llamar la atención de Leonardo.

—¿Qué has dicho? —Marcello carraspeó su garganta.

—Quien irrumpió en este lugar e hizo este grave daño no fue la familia Fiorentini —Leonardo soltó un fuerte y largo gruñido ante el comentario de Marcello.

—¿Qué mierda sucede contigo, dónde tienes la cabeza? —reclamó Leonardo de manera agresiva.

—Un informante me dijo que...

—¡Tus malditos informantes nos quieren muertos! —le gritó en su rostro int