Llegaron a la casa y Kate se había quedado dormida, Bastien la miró con amor y sacó un mechón de su rostro, su Kitty seguía siendo la misma. Bajó del auto y abrió con cuidado, la tomó en sus brazos y la llevó a su habitación, la acostó con cuidado y sacó sus zapatos.
— mmm Bastien…. — Kate lo llamó entre sueños y Bastien no pudo evitar sonreír, se acercó a ella y besó su mejilla
— Aquí estoy Kitty, por favor vuelve a mí. — besó su frente y se fue al auto, bajó todas las bolsas dejándolas en la habitación de Kate, revisó la bolsa de la lencería que había comprado hoy y había conjuntos muy parecidos a los que usaba con él, eso lo hizo sonreír.
— Kitty si compras esto es porque quieres que yo los vea, eso me gusta. — terminó de dejar las bolsas y cubrió a Kate, juntó la puerta dejándola entreabierta y fue a cocinar.
— En poco tiempo la casa estaba inundada con aroma a comida que despertó a Kate, abrió los ojos y estaba acostada, arropada con una manta, se sentó y vio todas las bolsas all