Miara había estado más nerviosa de lo normal últimamente, la duda sobre la supuesta infidelidad de Robert con la Omega era más de lo que podía soportar, y no por la infidelidad en sí, porque Rob no había sido exactamente el marido más fiel, ni tampoco una mansa paloma, sino que la reventaba que fuera con ella, ¡Precisamente ella!
Dentro de su acuerdo matrimonial siempre había estado claro que Rob tendría derecho a ciertas relaciones extramaritales, siempre que, no afectaran al matrimonio, al lugar de Miara como Luna ni le dieran hijos bastardos, y hasta ahora, ella había estado tranquila si con eso, lo mantenía lejos de su cama en los días en los que estaba indispuesta.
En otras palabras, era bueno tener reemplazo para poder descansar, y liberarse del genio del Alfa. Pero de ahí, a saber, que Rob preguntaba por los efectos del vínculo entre mates y de pronto S