« ¡Vamos, Sienna, ya estás metida en este asunto! » se dijo a sí misma, obligándose a dejar la mano en su lugar sin moverla un solo centímetro, debía convencerse de su capacidad para darle un giro a su vida y decidir su propio destino por si misma, aunque eso significara ir en contra de los designios de Selene.
Chris la tomó suavemente entre las suyas mientras la alagaba con sus palabras, él siempre supo que decir, y como ser un verdadero y galante caballero.
— Sienna, quiero que sepas que estoy realmente alagado por esta oportunidad que me das…
Ella sintió algo parecido al remordimiento muy en lo profundo, porque lo quería como a un hermano, y no estaba en sus planes hacerle daño, además, le debía demasiado, estaba en deuda con él de muchas formas y su amor por él era del tipo familiar, del que se siente por alguien inestimable, pero al que nunca verías como pareja.
— Chris, yo…
— Sienna, déjame expresar lo que siento porque no sé si seré capaz de hacerlo después — Él pidió con humil