Resumiendo los acontecimientos, la exitosa operación realizada por Val a Adam era la novedad entre los pasillos del hospital. Por otro lado el lugar se encontraba bajo el cuidado del equipo de seguridad de Scott y asociados y de la policía. Así fueron pasando algunos días. 

Andrea se encontraba desaparecida y aún no sabemos con quién estaba hablando... 

Adam aún no despertaba, los doctores le dicen a Blue que es normal en su condición y sólo deben esperar su evolución.

-Ay, cariño, no hayo la hora en que despiertes y puedas abrazarme. Ya deseo poder besarte y decirte lo mucho que te amo -Blue como todos los días desde que Adam se encontraba en recuperación llegó temprano para acompañarlo y limpiar sus heridas. En eso, tres golpecitos señalaron que había una visita... 

-Adelante.

-Buen día, señorita Soré, ¿cómo sigue el abogado Scott? 

-Fiscal, un gusto saludarle, pues aquí sigue, se encuentra estable, pero aún sin querer despertar. Sólo debemos esperar. ¿Cómo va todo? ¿alguna novedad de esa mujer? 

-Hemos avanzado muchísimo gracias a los archivos que nos entregaron, por lo pronto congelamos todas las cuentas de la señorita Thompson y esperamos que eso hará que salga del escondite donde se encuentra. Sin dinero y con todo bloqueado no dudamos que aparezca pronto. 

-Eso espero fiscal, la verdad esto me supera. No puedo creer que con todo lo que hemos hecho esa víbora aún esté libre. 

-Bueno, me despido creo que mi tiempo aquí ha terminado. Cuando despierte o tenga cualquier novedad por favor hágamelo saber de inmediato por favor. 

-Por supuesto fiscal - Cuando el fiscal Sawyer abrió la puerta para salir apareció en la entrada una doctora. 

-Buen día, Señora, debo revisar al paciente, ¿puede salir un momento? 

-¿Doctora? 

-Collins, Daniela Collins, soy colega de Val y hoy me tocó hacer ronda en esta área -le respondió de corrido como si no quisiera que la pillara en algo malo. 

-¿Dra. Collins que hace aquí? No debe estar en lugar -Ese fue Bruno que estaba parado en la puerta que dejó abierta el fiscal, se dirigió directamente a ella y la tomó del brazo. 

«Esta chica me da mala espina, pero no sé el porqué de aquello, además cada vez que Ethan o Val la ven o hablan de ella, de alguna manera ellos se notan incómodos, pero nada dicen» 

-¿Quién te crees tú imbécil afeminado? -se soltó de su agarre y le gritó muy molesta. 

-Perdón, pero pueden callarse y usted doctora, esas no son formas de referirse a un colega ni a nadie -le habló molesta Blue-. Hola, Bruno. qué bueno verte. 

-Hola, mamá postiza. Perdón por la molestia, pero la Dra. Collins sabe claramente que los únicos que pueden revisar la evolución del señor Scott son Val y Ethan. 

-Eh... eh... es que tenía asignado esta área -dijo tartamudeando-. bueno, ya me voy y tú afeminado no me vuelvas a dirigir la palabra. 

-Bruja -dijo bajito para que no se diera cuenta, pero Blue lo había escuchado. Esa doctora salió de la habitación y Bruno se acercó con la intención de decirle algo a Blue... 

-Blue... este... 

-Ya suelta Bruno, a mí tampoco me da buena espina esa doctorcita. 

-Sabes, cuando terminó la cirugía del Sr. Scott. Escuché hablar por teléfono a esta loca con alguien y le daba los pormenores de que todo iba bien, la verdad pensé que era a algún periodista para dar la exclusiva, pero con esto que se acerque a la habitación me suena muy extraño, ella sabe los protocolos y no creo que sea algo bueno lo que está haciendo. 

En eso ambos escuchan unos quejidos y se voltean a ver... 

¡Adam despertó! Se incorporó en la cama y trató de decir algo... 

-Cariño -los dos se acercaron a su encuentro, él miró a Blue y extendió sus brazos, ella no aguantó y se lanzó hacia él y lo abrazó con todas sus fuerzas-. Por fin despertaste.

Sus lágrimas no paran de salir y él las seca con sus dedos. Adam se sacó la mascarilla y la besó en coronilla.

-Oh Blue, mi Blue te amo tanto... 

-Señor Scott, por favor descanse y no se agite, Blue iré a buscar a los chicos. 

-Gracias Bruno -Blue se detuvo un poco y le dijo-. Hazlo con mucha cautela, después de esta visita es mejor que nadie sepa que Adam despertó. 

-Entendido - Bruno salió de la habitación y Blue volvió sus ojos hacia ese hombre que llenaba su mundo y que estuvo a punto de perder... 

-Blue, tranquila -besó su coronilla y le da golpecitos en la espalda-. Lo sé, te amo y si tu no me amas o me amas menos no importa. Yo lo haré por los dos y por esos pequeñitos que llevas en tu vientre. 

-¿Qué? -lo miró dudosa-. ¿Cómo sabes lo del bebé y por qué dices pequeños? 

-¿Crees que eres la única que sabe que estamos embarazados? -volvió a verlo y vio su mirada cristalina que le dijo todo lo que sentía por ella-. Ya lo sé, seremos los mejores papás del mundo y esos pequeñitos serán la confirmación de lo mucho que te voy a amar. 

-Adam, no sé cómo te enteraste, pero déjame decirte que no son dos. Bueno en realidad aún no lo sé, con todo lo que está pasando aún no me he hecho un chequeo. 

-Pues, ¿quieres apostar conmigo?

-Primero, recupérate, me has hecho pasar el susto más grande de mi vida, pensé que te perdía. - Adam siguió abrazándola como no queriendo soltarla. 

-Nunca amor, siempre estaré ahí y seré tuyo, sólo tuyo. 

-Que cursi se puso después de estar al filo de la muerte, señor Scott -dijo ella riendo, después de todo ese tiempo por fin podía reír un poco más aliviada. 

-Auch -expresó Adam quejándose del dolor que le había causado reír junto a su mujer.

-¿Qué pasa estás bien? -Lo tocó por todos lados y revisó para saber que pasaba y en el fondo sabía que a él le encanta.

- Si -responde-. Tengo un dolor aquí -colocó las manos de ella en su pecho y luego la volvió a aferrar a él. 

- ¡Adam!

En eso entran George, Ethan y Bruno. 

-Veo que despertó el bello durmiente. 

-Qué bueno papá, no sabes lo preocupados que estábamos.

-Pues, ya saben hierba mala -ella rio sólo de los nervios que tenía y que poco a poco se estaban disipando. 

-Auch, Blue, para -dijo riendo.

-Relájate y deja que te revise -mientras él y los chicos ríen, George intenta revisarlo. 

-Bueno, bueno Bruno nos llamó y nos dijo que tienes que decirnos algo Blue. 

-Así es George, pero antes de sacar conclusiones. Por favor, Bruno ¿puedes contarles que es lo que escuchaste y viste de la doctora Collins? 

Así Bruno les relató el incidente del otro día y que Collins estuviera en la habitación de Adam sabiendo que no le era permitido. Con Adam decidieron callar el hecho de que había despertado para lograr descubrir si ella estaba involucrada y además descubrir dónde se podía encontrar Andrea. 

-Es muy sospechoso, pero no quiero desconfiar de la doctora Collins tan fácilmente. Ella es una muy buena doctora y aunque sea una odiosa no me cabe en la cabeza sus suposiciones. 

-Así es jefe, y matamos dos pájaros de un tiro para salir de las dudas digo -se encoge de hombros dando a entender su punto. 

-De acuerdo, pero necesitamos a Claudia para que colabore y a Val. Ella es la médico tratante y quién está a cargo de tu condición. 

-Así es papá, ella fue quién te operó.

-Guau, eso sí que no me lo esperaba. Tendré que agradecerle por el resto de la vida. 

-Textualmente -señaló un muy risueño Ethan-. Dijo que no te dejaría morir porque debía cortarte en pedacitos por hacerle un bebé a Blue -dijo provocando que todos estallen en una carcajada.

-A propósito George, necesitamos que revisen a Blue. Debe pagarme una apuesta. 

-¿Eh? 

-Dame unos minutos, le pediré a Claudia que venga con la máquina de ultrasonido y aprovecharemos de ver que todo esté bien. Ustedes -señalando a Ethan y Bruno-. vayan por Val y nos vemos en quince acá. 

Los chicos salen y ahí me quedaron Adam y Blue que no se han soltado desde que despertó. Blue se sentía tan pequeña en sus brazos, él la acaricia y besaba con pequeños piquitos y ella sólo se acurrucaba cada vez más en su pecho.

-¿Adam? -le miró asustado.

-¿Qué pasa amor?

-¿Qué haremos con Alma y Thomas?

-Por lo pronto creo que no deben saber que desperté. Así los mantenemos seguros, por favor dame el teléfono -buscó su celular y se lo entregó, marcó el teléfono de Jack y lo colocó en altavoz- ¿Jack?

- ¡Jefe! Qué bueno que despertó, no sabe lo preocupada que ha estado la señorita Blue por usted.

-Ya, ya respira hombre. 

-Te pareces a Alma -dijo Blue

-Si, Jack, escúchame bien, nadie debe saber que desperté. Necesito que redobles la seguridad de los chicos, la de mi hermano y Stuart.

-Entendido, señor.

-Perfecto, ahora te dejo y te encargo a mi familia -Adam cortó la llamada y volvió a abrazar a Blue.

-Pobre Jack, lo que le espera.

-¡Auch!

-Tranquilo, amor -En eso entraron Val, Ethan y Bruno a la habitación.

-Pero miren lo bien que se ve mi paciente.

-¡Shuuuuuu! - Hacen al unísono los varones presentes en ese momento...

-Shuuuuu, baja el volumen hija.

-¿Porque?

-Ahora que estás aquí te debemos explicar algo-dijo Ethan. 

-Pero primero ven acá hija - Val se acerca dudosa y sonrojada hacia Adam. Al quedar frente a él éste le extendió sus brazos.

Ambos se fundieron en un abrazo que hizo que nuevamente se llenen de lágrimas los ojos de Blue. Ethan se acercó a ella y posó su brazo en su hombro, como dándole soporte. Él también tiene los ojos aguados, es una escena muy linda, que llenaba su corazón y le hizo sollozar de nuevo.

-Gracias -le susurró al oído.

-No la sacará tan barata señor, me debe algunas explicaciones -le susurró también al oído.

-Digna hija de su madre -Todos sueltan una carcajada «definitivamente estos dos me sacarán canas verdes» piensa Blue.