Estaba en un lugar extraño, sólo veía oscuridad, hasta que un punto de luz me hizo seguirlo, en eso llegué a un prado y me encontré a Diana sentada en una banca pintando el lugar donde nos encontrábamos.
-¿Diana? -Hola, Adam - Ella se gira nuevamente a su pintura y mueve su mano para que me siente a su lado. -¿Estoy muerto? - fue lo primero que se me vino a la mente al estar sentado junto a ella, me dio una cálida sonrisa. -No cariño, aún no lo estás. Sólo te encuentras en un estado intermedio, por eso es por lo que ellos y yo podemos estar aquí para ayudarte, pero si quieres puedes quedarte aquí conmigo. -¿Pero los chicos? No puedo dejarlos solos, no ahora - Mis manos se empuñan y mi cuerpo se estremece de sólo pensarlo. Ella puso su mano en el mentón y dice pensativa. -¿Pero ellos tienen a Blue? -¿La conoces? -Por supuesto, es una gran mujer, ella logró lo que yo nunca pude - dijo con un dejo de tristeza -. Mira hacia allá - me indicó hacia un árbol donde están dos pequeños jugando. -Niños, vengan. -¡Papi! - ambos niños se acercaron a mí y me abrazaron, de inmediato me sentí tan bien con ellos, sentía paz y mucho amor por ellos, pero ¿Porque? ¿Papi? Miré Diana con cara con incertidumbre. -Son tus hijos junto a Blue - respondió muy tranquila. -¡¿Qué?! -Tú sabes cómo se hacen los niños Adam, eso no se pregunta. Niños tranquilos, su papá está nervioso -aunque sonó a una reprimenda lo hace con mucha más calma y mis bebes se quedaron tranquilos.-Son tan hermosos - La niña se sentó en mis piernas y tocó mi cara tratando de consolarme, no me había dado cuenta que por ella surcaban lágrimas hasta que la pequeña las limpio.
-Papito, te quiero mucho y ya quiero pronto ver a mi mami. -Loca, si aún estamos en la panza de ella. Sabes que falta mucho para que la podamos ver, pero papá ¿por qué estás aquí? - Tomé sus caritas con mucho amor y me quedo ahí mirándolos embelesado por unos segundos. -Bueno, tal parece que estoy aquí para conocerlos mis niños. -Papito, eres muy guapo, yo soy Melanie. -Hola, Mel, sabes algo... eres igualita a tu mami y tus hermanas. -¡Yey! - exclamó al mismo tiempo que sonrío feliz y le sacó la lengua a su hermano. -¿Y tú campeón? -Yo soy Cameron, papá, ¿a quién me parezco? -Tu eres todo un Scott, te vez igual que mi Thomas y mi Ethan - es ahí que ya no aguanté y me puse a llorar con toda mis fuerzas sacando todo el dolor que me invadía en esos momentos los abracé y olfateé sus cabecitas, huelen a Blue, mi Blue... Debe estar sufriendo ahora y yo no sé qué hacer. -Adam. -Dime, Diana. -Si estoy aquí es para pedirte perdón, sé que mi actuar no fue de lo mejor, pero ya mi vida se apagaba y tú debías ser ese roble que protegiera a nuestros hijos. Por favor si decides volver ve a mis pertenencias, ahí sabrás más de lo que nos pasó y podrás encontrar respuestas y la paz que necesitas. Ahora ¿qué decides? Ethan te está llamando... -¡Papá! Por favor, no nos dejes, ¡Por favor! - esa era la voz de Ethan que está llamándome. Sentí un fuerte dolor como si me estuvieran clavando un puñal, vi a Diana y ella ya sabe mi respuesta. Me puse de pie con mis pequeños uno en cada brazo, los apreté en mi pecho y besé sus caritas. -Veo que decidiste bien, vete tranquilo que yo los cuidaré, esperen su llegada. Ya es hora de que partas. -Si papi, ya pronto estaremos juntitos -me dice Mel, mientras me da un sonoro beso en la mejilla. -Nos vemos papá, te amamos.-Gracias por todo Diana, cuida a mis peques, mientras yo regreso.
-Por favor, dile a mis niños cuanto los amo y que algún día nos volveremos a reencontrar. -Papito, cuídate mucho, esto todavía no acaba. -Si papá, mami también sigue en peligro, por favor cuídala. -Se los prometo - Ellos volvieron a abrazarme con sus pequeñas manitos y yo les devolví el abrazo y besé sus coronillas... En eso siento que un fuerte golpe de energía me remueve por completo y todo se vuelve oscuridad. -------- -Tenemos pulso... -Gracias, Val. Muchas gracias -Ethan se quitó las lágrimas y sintió que se había sacado un gran peso de encima. -Nada de gracias, Ethan debemos terminar - «Gracias diosito, por escucharme» suspiró Val para sus adentros. Luego de casi 20 horas de operación, muchas bolsas de sangre y sacando fuerza de flaqueza se apagó la luz que indicaba que se terminó la operación... Adam había resistido, en su pensamiento se encuentra la reunión con Diana y sus pequeñitos. Mientras Val y Ethan exhaustos se miraron y de esa forma se animaron para lo que viene ahora. -Val, de verdad gracias por hacerlo posible -soltó un suspiro. -Bueno, ahora a contarle a todos y tranquilo, Adam ha pasado a ser una persona importante para mí y no lo iba a dejar ir antes de cortarlo en pedacitos por hacerle un bebé a mi mamá. Ambos soltaron una risa de alivio y se dirigieron a la sala de espera donde se encontraba toda la familia esperando respuesta. Se abrió la puerta de la sala de operaciones y ambos salieron con caras alegres. Blue se puso de pie y Val la miró dándole la tranquilidad que ella esperaba. -¡Gracias, muchas gracias, chicos! - Madre e hija se fundieron en un abrazo sanador, al cual se unieron Alma y Thomas... -¿Puedo? -preguntó un muy sonrojado Ethan. -Ven acá -le pidió Blue aceptando gustosa y así abrazó a todos sus hijos-. Ahora todo estará bien.Mientras tanto, en otra de las salas del hospital se escuchaba una llamada inesperada...
-Te dije que no me llamaras en mis horas de trabajo.
-Cuidado como me respondes pendeja, ¿sabes qué pasó con esos imbéciles? -El padre de Ethan sobrevivió al disparo y ahora está en recuperación. -¡Maldición! deberemos hacer todo para eliminarlos ahora que están en el hospital. -¿Estás loca? Esto está lleno de oficiales, será imposible hacerlo. -Pues soluciónalo, ¡para eso te pago! ¿Qué estará tramando Andrea ahora? ¿con quién estará hablado? ¿Adam podrá despertar?