Amiga y vio como Zoe se abalanzó sobre él para abrazarlo. La incomodidad se sintió de inmediato, Abigail contuvo sus ganas de llorar, no quería arruinarle la felicidad a ninguno de los dos.
No quería arruinarle la felicidad a Rafael, felicidad que ya no dependía de ella.
Zoe se separó de él y lo besó para luego acomodarse al lado de él y mirar a Abigail.
Rafael estaba en shock parecía no reaccionar con facilidad.
Por inercia puso su mirada en Abigail.
—Y bien ¿No piensas felicitarnos? En verdad esperaba que te emocionara la noticia y ver si de esa manera te animas a dejar de querer ser la amante de mi esposo.
—Zoe, no sigas con eso.
—¿Es que no le des la cara? parece que fue la peor noticia que pudo recibir. Querida deberías alegrarte, y mirar otros horizontes.
—Tiene toda la razón señora. Los felicito, de verdad me alegra que haya llegado a su matrimonio un bebé. Estoy segura que eso los va a unir más.
Abigail pasó las manos por su ropa, tenía sudor en ellas, estaba sudando