—¿Quién podría ganarte en una pelea, señorita Bustamante?
Celeste respondió furiosa:
—¡No estoy bromeando! ¡La ex novia de Lorenzo nos emboscó a Marisela y a mí, y trajo a tres matones!
—¡Marisela y yo estamos heridas! ¡Y han destrozado mi bolso! ¡Era mi favorito!
Al escuchar esto, Ulises frunció el ceño. Mientras Celeste seguía quejándose y expresando su indignación, él dijo:
—Dame la ubicación de la comisaría.
Celeste colgó y vio que la policía ya había llegado.
Perfecto. Isabella y los tres matones habían sido capturados, sin excepción.
Los tres se dirigieron a la comisaría más cercana, la misma de la vez anterior, donde Marisela y Matías ya conocían el camino.
En el vestíbulo.
Celeste envió la ubicación a Ulises. Mientras los tres daban sus declaraciones, Isabella y los matones fueron llevados a la sala de interrogatorios.
Cuando terminaron las declaraciones, el oficial que había interrogado a los detenidos salió y dijo a modo de conciliación:
—La señorita Fuentes afirma que esos h