Diez días después…
Regresa la calma a la mansión Romanov, Nicolay y Emily se entienden cada vez mejor y ella, gana fuerzas cada día con el entrenamiento. Camille la ayuda con su entrenamiento a la vez que lo hace con Alex quien ha resultado ser un alumno excelente. Macarena, mejora pese a las noches de horror que pasa con los recuerdos convertidos en pesadillas que vive al cerrar los ojos, pero Darko la acompaña como un guardián silencioso. Su presencia imponente ni siquiera se percibe, se ha convertido en una sombra por la tristeza que lo invade, la desesperanza que lo arropa y el temor de ser rechazado por la mujer que ama profundamente.
Anita, ella vive un poco más cada día. Continúa siendo una sombra sin sentirse prisionera. No confía. No sonríe. Pero ha despertado en ella el instinto maternal que la hace cómplice de la criatura que lleva en su vientre y sopesa la posibilidad de poder ser feliz con su hijo sin esperar un rescate de parte de Clara Maldonado. Sabiendo que en cualqui